Llega el momento de la verdad para el Espanyol, que se juega en Mestalla ante el Valencia el ser o no ser en Primera. Desde hace muchas semanas estábamos esperando que se diese la posibilidad de llegar a las dos últimas jornadas del campeonato con opciones matemáticas de lograr la permanencia, y pese a que el escenario no es el más deseable -el Espanyol ha dejado de depender de si mismo y ahora toca esperar que otros resultados de rivales directos en la lucha por evitar el descenso acompañen- al menos existen posibilidades de que se acabe obrando el milagro. En cualquier caso, independientemente de ese factor externo lo primero para que el Espanyol tenga opciones de salvarse es ganar su partido ante el Valencia, ya que todo lo que no sea sumar los tres puntos en juego será despedirse definitivamente de cualquier opción.
La hora de la verdad para el Espanyol, que necesita ganar al Valencia
El Espanyol viaja a Valencia tan sólo cuatro días después de que los blanquiazules viviesen una verdadera montaña rusa emocional durante los 90 minutos de su enfrentamiento ante el Atlético. Los espanyolistas, que habían protagonizado un más que buen inicio de encuentro, vieron como tres latigazos del conjunto colchonero, uno de ellos propiciado por ese elemento tan discutido llamado VAR, les ponían el partido absolutamente cuesta arriba; pero en un buen arreón que demuestra que Luis García está siendo capaz de transmitir al grupo su espíritu donde la lucha y la entrega hasta el final son innegociables, el conjunto perico fue capaz de conseguir la igualada y sólo la falta de puntería de Joselu impidió consumar una remontada que habría sido histórica. Al final, el punto dejaba con vida a un Espanyol que ahora sí, se queda sin margen alguno en esta visita a Mestalla de la que hablaba Luis García en la previa: ” Nos enfrentamos a un rival al que no le ha salido el año como esperaba. Y nosotros hace tiempo que estamos en el alambre. Hemos reiterado mucho el tema mental. Y si yo tuviera que jugármela, no me gustaría hacerlo contra el Espanyol a estas alturas. Venimos de situaciones complicadas y ahora mismo lo tenemos en nuestras manos. No sé cómo están los demás equipos, pero lo que sé es que estos de aquí dentro están muy locos y en estas condiciones puede pasar todo, como el otro día ante el Atlético: pudimos ganar 4-3 viniendo del 0-3. Es una clara evidencia de cómo está el equipo de convencido. Los jugadores están muy fuertes, como han demostrado estas semanas. Es un equipo hecho a base de golpes psicológicos. El otro día, en Vallecas y en casa, demostraron una fortaleza mental tremenda cuando parecía que todo estaba perdido, que no ha bajado los brazos, que ha levantado un 0-3 al Atlético: está enchufado y convencido de sus posibilidades de mantener la categoría”
El Valencia, que está firmando la peor temporada de los últimos 40 años, necesita ganar para asegurarse la salvación
Si para el Espanyol todo son urgencias, el Valencia de Rubén Baraja no puede afrontar la cita de Mestalla con un ánimo mucho más sosegado. La que ha sido la peor temporada de los últimos 40 años del conjunto ché ha supuesto durante muchos meses una verdadera agonía para los aficionados naranja, que en estas últimas jornadas del curso aún no han podido quitarse el miedo del cuerpo. Los nervios, la angustia y el enfado con la propiedad y la cúpula directiva de la entidad han sido la tónica habitual durante un año de sufrimiento extremo en todos los sentidos, algo que han compartido en muchos aspectos con los seguidores pericos, y aunque gracias al buen trabajo de Rubén Baraja la situación ha ido mejorando aún no han conseguido escapar de la quema matemáticamente. El Pipo ha aplicado un libreto sencillo pero eficaz, el verdadero ABC del fútbol, simplificando el juego, recuperando la confianza de unos futbolistas cuyo ánimo estaba bajo mínimos y apostando por hombres del Valencia Mestalla sin experiencia en Primera, y han respondido a la perfección -caso de Javi Guerra, Alberto Marí y Diego López-. Si a ello le unimos que calidad tiene de sobras los futbolistas albinegros, lo lógico sería que hubiesen salido del pozo con cierta holgura, lo cierto es que una incomprensible relajación en su visita al Mallorca en un encuentro que demuestra que en la pelea por la permanencia está prohibido especular les dejó con la miel en los labios y ahora deberán ganar al Espanyol, que como hemos dicho se juega la vida, para certificar matemáticamente la salvación. Toda una final, como reconocía en la previa Rubén Baraja, que insistía que “ganando dejamos una temporada durísima en todos los sentidos y lo vamos a afrontar con toda la ilusión. Estoy como una moto, esperando que llegue el partido para transmitir energía. Tenemos que hacer un gran partido. Desde que vine mi misión es enchufar energía al equipo y que el equipo no se altere. Estamos ante una gran oportunidad y vamos a tratar de aprovecharla. Este partido es una final, pero habríamos firmado llegar a esta situación de disputar este partido en nuestra casa y depender de una victoria en casa”. Del Espanyol, destacaba el técnico del Valencia que “es un equipo que hace goles pero también recibe. Es un juego que juega bien al fútbol, que tiene jugadores desequilibrantes. Nos van a poner en dificultad, tenemos que potenciar nuestras fortalezas. El equipo en Mestalla siempre ha competido, es nuestra gran final y el último partido en casa. Tenemos la oportunidad de rematar con una victoria para certificar la permanencia”. Existe la duda de si Baraja cambiará el esquema ante el Espanyol: “Respetamos al rival pero tenemos que centrarnos en nosotros. El objetivo es que tenemos que hacer un partido muy completo de mentalidad e intensidad. Tenemos que tener fortaleza mental para gestionar las emociones que van a ser muchas. Estamos en nuestra casa que es el mejor escenario posible para certificar la permanencia”.
Alineaciones posibles:
Valencia CF: Mamardashvili; Correia, Diakhaby, Paulista, Gayà; Almeida, Nico, Javi Guerra; Kluivert, Samuel Lino y Cavani.
RCD Espanyol: Pacheco; Óscar Gil, Cabrera, Montes, Oliván; Darder, Calero, Melamed; Denis Suárez, Braithwaite y Joselu.
Campo: Mestalla
Horario: 19:00 horas, Movistar +