El Espanyol conocerá este miércoles 7 de junio su sanción por los diferentes objetos que se lanzaron desde la grada del RCDE Stadium al terreno de juego durante el duelo que disputó el equipo de Luis García ante la UD Almería el pasado domingo. En el transcurso de este encuentro, los integrantes de la Grada de Animación enviaron balones de playa sobre el campo en dos momentos diferentes del enfrentamiento, mientras otras personas del público proyectaban bolas de tenis hacia el césped desde diversas zonas de la tribuna, obligando a que se detuviera el partido. Además, justo antes de que Luca Koleosho marcase el tercer gol de los locales y también cuando Adrián Embarba se disponía a lanzar el penalti que supuso el 3-3, apareció un segundo esférico sobre el verde procedente de la grada de Cornellà – El Prat.
El escenario más probable es que el Espanyol reciba una penalización de 3.000 euros por estos hechos y un aviso de cierre de su estadio, ya que artículo 107 del Código Disciplinario de la Real Federación Española de Fútbol establece lo siguiente: “Se considerará infracción de carácter grave y será sancionado con multa en cuantía de 3.000 euros y apercibimiento de clausura, el lanzamiento de varios balones, o de cualquier otro elemento al terreno de juego procedentes de la grada, con independencia de si el juego está o no detenido”.
Posible cierre del RCDE Stadium
Es importante tener en cuenta que el Espanyol espera otra sanción por la invasión de campo que protagonizaron algunos de sus aficionados tras el derbi del pasado 14 de mayo cuando los jugadores del Barça celebraban el título de liga sobre el césped del RCDE Stadium. Aquel hecho, con total seguridad, será considerado como grave o muy grave por parte del Comité de Competición de la Real Federación Española de Fútbol. Por tanto, como el club blanquiazul acumulará dos incidencias de alta relevancia, este organismo podría optar por cerrar Cornellà – El Prat durante algunas jornadas de la próxima temporada.
