El ex jugador del Espanyol Raúl Baena tuvo un paso complicado por las filas del FC Barcelona. El andaluz abandonó el Barcelona a finales de la temporada 2007-08, para fichar por el Espanyol, que a través del jugador pagó a la entidad azulgrana 30.000 euros de indemnización. Sin embargo, el FC Barcelona reclamó una indemnización de 3,5 millones de euros por extinción anticipada del contrato que unía a ambas partes, después de que el Tribunal Supremo declarara nulo el mismo. El máximo organismo jurisdiccional estimó el recurso de casación interpuesto por el futbolista del Espanyol, condenado por la Audiencia de Barcelona a indemnizar al club azulgrana con 3,5 millones por incumplir el contrato por diez temporadas que los padres del jugador firmaron con la entidad azulgrana en 2002, cuando éste aun tenía 13 años. Una batalla judicial entre Baena y el Barça que vuelve a ser noticia a raíz de unas imágenes en que se ve al ahora futbolista del Sabadell, estallando durante el partido de los arlequinados contra el Barça Atlètic saltando del banquillo para encararse con el árbitro, Monterubio Torres, y para insultar a los futbolistas del filial azulgrana, arengando a sus compañeros contra ellos. Los medios no han perdido la oportunidad de remarcar esta actitud refiriéndose al pasado perico de Baena.
