El 1×1 del Real Oviedo – RCD Espanyol: las notas a la actuación de los futbolistas blanquiazules ante el conjunto azul:

Fernando Pacheco: 5 CORRECTO
Dejó una buena parada a Jimmy en un tiro desde la frontal. En los goles, poco pudo hacer.

Omar El Hilali: 3 SUPERADO
El Oviedo buscó hacer daño por su banda y lo consiguió. Su peor partido hasta ahora.

Fernando Calero: 4 BLANDO
En más de una ocasión se mostró blando ante Borja Bastón y compañía. Otro mal partido.

Leandro Cabrera: 4 DESAFORTUNADO
Su intento de cortar el centro lateral acabó sirviéndole el balón en bandeja a Masca. Impreciso en salida de balón.

Brian Oliván: 3 DESACERTADO
Perdió la marca de Masca en el 1-0 y en otra clara ocasión del atacante portugués en la segunda parte. En ataque, nada.

José Gragera: 5 DIGNO
De los pocos que dió la cara, ganando duelos en el centro del campo y mostrando personalidad.

Keidi Bare: 3 SOBREPASADO
La responsabilidad de ser el organizador del equipo le quedó muy grande. Muy impreciso con el balón en los pies.

Edu Expósito: 4 DILUIDO
Lejos de la versión que parecía estar recuperando. Menos intenso, menos participativo y menos peligroso.

Javi Puado: 4 FALLÓN
Regresó a la titularidad sin demasiado acierto. Falló una clara ocasión tras un rechace del portero.

Pere Milla: 2 DESAPARECIDO
El equipo no lo encontró y él no estuvo bien al asociarse con sus compañeros. Cuando la tuvo, le pegó al aire.

Martin Braithwaite: 4 DESESPERADO
Tuvo un buen tiro desde la frontal en la primera parte. Más allá de eso, sigue costándole mucho jugar este tipo de partidos.

Álvaro Aguado: 5 TARDÍO
Mejoró ligera y momentáneamente la organización del equipo. En la primera parte se notó su ausencia.

Óscar Gil: 2 INSUFICIENTE
Entró por un Omar en baja forma y amonestado, pero estuvo todavía peor que él.

Jofre Carreras: 4 ESTÉRIL
No consiguió revolucionar el partido como suele hacer, pero entró en un contexto complicado.

Keita Baldé: –

Salvi Sánchez: –

Luis Miguel Ramis: 2 PERDIDO
Los cambios que introdujo en el once salieron mal y los de la segunda parte peor. Sigue costándole un mundo fuera de casa.
