El Espanyol está viviendo días de gran tensión después de que el primer equipo de Luis Miguel Ramis cayese derrotado el pasado domingo contra el CD Eldense. El conjunto catalán, uno de los tres descendidos de Primera división y en teoría principal candidato al ascenso directo, suma una sola victoria en los últimos siete partidos y con el tropiezo en el Nuevo Pepico Amat saltaron definitivamente todas las alarmas, dejando al preparador del Morell en el alambre. Ramis, que apuntó directamente a sus jugadores en rueda de prensa, vio peligrar su cargo casi tres meses después de su nombramiento en sustitución de un Luis García al que no ha sido capaz de mejorar en ningún apartado estadístico, aunque al final se decidía concederle una vida extra ya que la prioridad del club en esta semana tan especial es intentar traer algún refuerzo en lo que queda de mercado. Frenado al menos de manera momentánea su cese y si nada cambia en las próximas horas, Ramis se sentará en el banquillo el próximo domingo contra el Levante UD consciente de que se le acaban las oportunidades de enderezar el rumbo o será destituido, algo que ya le ha pasado en dos de los tres clubes que ha entrenado antes de al Espanyol en LaLiga Hypermotion. Pero, ¿cuánto duró la paciencia en las anteriores entidades en que prestó sus servicios?
En el Almaría, Ramis fue destituidos tras una racha de 8 partidos sin ganar, con dos puntos y marcando un solo gol
Tras colgar las botas, el actual entrenador del RCD Espanyol Luis Miguel Ramis fue segundo entrenador del Juvenil A del Real Madrid la temporada 2006-07. La siguiente temporada debutó como primer técnico, dirigiendo al equipo cadete madridista. En enero de 2016, tras el ascenso de Zinedine Zidane al primer equipo del Real Madrid, Ramis se convertiría en el entrenador del Real Madrid Castilla; al término de la temporada 2015-16, y tras no conseguir el ascenso a la Segunda división pese a sus buenos resultados, es relevado en el banquillo por el también exmadridista Santiago Solari. Ramis firmó El 15 de marzo de 2017 como entrenador de la UD Almería para intentar sacar al equipo andaluz de los puestos de descenso a Segunda B tras la destitución de Fernando Soriano unas semanas antes -eran penúltimos cuando asumió el cargo-; el primer curso cumplió su objetivo, renovando su contrato por un año más, pero el 12 de noviembre de 2017, tras disputarse 14 jornadas de competición y encadenar una pésima racha de 8 partidos sin ganar, fue destituido. Después de un buen comienzo en la competición, en el que el conjunto almeriense llegó a estar en posiciones de playoff de ascenso a Primera División, enlazó esas ocho jornadas consecutivas sin ganar en las que tan sólo sumó dos puntos y marcó un gol. Las cuatro últimas actuaciones antes del cese se saldaron con otras tantas derrotas que motivaron que el equipo cayera en descenso. Pese a destacar “la profesionalidad, el compromiso y el trabajo de Luis Miguel Ramis”, la UD Almería optaba por su despido.

Ramis, cesado del Albacete después de una pésima racha en la que sumó únicamente 6 puntos de 36 posibles y tenía al equipo en descenso a Segunda B
El 24 de junio de 2018 el Albacete Balompié apostó por Luis Miguel Ramis como nuevo técnico. De entrada, apostó por una idea de fútbol vistosa y combinativa que llevó al cuadro manchego desde las primeras jornadas a la parte alta de la clasificación, proclamándose subcampeón de invierno a un solo punto del líder, siendo entonces el equipo menos derrotado de la categoría (solo 2) y encadenando 12 partidos consecutivos sin perder. El 27 de marzo de 2019 renovó su contrato con el club por dos temporadas más, quedando vinculado hasta junio de 2021, antes de terminar el campeonato en 4.ª posición. Sin embargo, un año más tarde, el 3 de febrero de 2020, después de una pésima racha en la que sumó únicamente 6 puntos de 36 posibles y tenía al equipo en descenso a Segunda B, el conjunto manchego anunciaba su destitución como entrenador del primer equipo. La decisión llegaba después de que el Albacete perdiera ante el Oviedo, en la que era la tercera derrota consecutiva y la novena jornada sin ganar del cuadro blanco -el anterior triunfo databa del 16 de noviembre anterior, cuando superaron a domicilio al Zaragoza (0-1).

En el Tenerife, fue el propio Ramis el que decidió marchar, sin que nadie en el club intentase retenerlo
El 24 de noviembre de 2020, Luis Miguel Ramis fue presentado como nuevo técnico del CD Tenerife. Se hizo cargo del equipo insular cuando ocupaba la 17ª posición de la clasificación tras 14 jornadas de Liga y lo dejó 14.º al término del campeonato. Al año siguiente, obtuvo el 5º puesto en la Liga regular y logró llegar hasta la final de la promoción de ascenso a Primera División, pero fue derrotado por el Girona. El 22 de abril de 2023, a falta de seis jornadas para el final de la competición y aún con algunas opciones de llegar al playoff, anunció que abandonaría el club insular a finales de temporada, acabando como 10º clasificado al término de la Liga. Ramis defendió esta decisión argumentándola en razones “deportivas” y que, con su marcha, además de “tristeza” sentía “decepción”; hay que reseñar que cuando el tarraconense comunicó su decisión al club, que estaba en pleno proceso de cambios importantes en su estructura, nadie intentó convencerlo de que se quedase: “Hubo un interés en que nosotros pudiéramos formar parte del proyecto, pero quedaban muchas cosas por hacer todavía y también consideramos que no era el momento adecuado para decantarse por nada, porque lo importante para nosotros era que la temporada no se enquistara. Estábamos en una posición en la que un pequeño bajón nos hubiera provocado ponernos en problemas y lo último que quería yo era despistar, en ese sentido. Al final optamos por el momento adecuado para tomar esa decisión. También el club nos lo pidió porque obviamente, y con con todo el sentido, querían planificar y organizarse de cara a la temporada que viene. Y esto es lo que hicimos. A partir de ahí no ha habido ningún contacto más. Colaboración cordial entre todos para, como siempre, intentar ayudar a lo más importante, que es a los jugadores, al club y a la afición a ganar partidos y a no pasar apuros”.

