A la espera de que se juegue este domingo el partido entre Sporting de Gijón y Espanyol (El Molinón, 21:00 horas), este sábado ya se ha jugado el encuentro de ida de la otra eliminatoria del playoff de ascenso a Primera división, de la que ha de salir el rival de los de Manolo González si éstos son capaces de eliminar al conjunto de Miguel Ángel Ramírez. A la espera de lo que suceda en la vuelta que se jugará el Ipurúa el miércoles 12 de junio a las 21:00 horas. Con el 0 – 0 final, el Oviedo está obligado a ganar al Eibar en Ipurúa el próximo miércoles si quiere acceder a la final del playoff -ello se debe a que el conjunto armero acabó la fase regular por encima del conjunto azul, y se clasificaría si se llega al final de la prórroga con empate-.
La primera parte en el Tartiere fue extraordinariamente igualada, sabedores ambos equipos de lo que había en juego sin querer conceder nada atrás a su rival. Pese a que el Oviedo de Luis Carrión, impulsado por una grada llena a reventar, protagonizó las primeras oleadas de ataque, los de Joseba Etxeberria supieron aguantar las embestidas azulonas. Tras unos minutos iniciales de ida y vuelta, el ritmo del partido fue bajando claramente, y pese a que los carbayones habitaron buena parte del tiempo en terreno rival, no fue hasta el final en que tuvieron alguna opción clara, como una de Alemão a la que respondió con una gran mano Luca Zidane; justo en la jugada siguiente el Eibar también se acercó con peligro con una acción de Stoichkov que pese a plantarse en el área pequeña rival fue perfectamente tapado por los defensores azules.
En la segunda mitad, el Oviedo siguió marcando el ritmo con el Eibar esperando pacientemente aprovechar alguna contra. El guion se asemejó bastante al de la primera parte: pocas ocasiones, juego muy frenado y pocas visitas a las áreas rivales. En el descuento, llegaba la más clara del encuentro con un cabezazo de Paulino que Luca Zidane enviaba a córner. Era, atención, el primer remate a puerta del cuadro carbayón.