Keita Balde, el delantero que llegó al Espanyol como uno de los fichajes de la temporada, no ha logrado cumplir las expectativas y no se ejercerá la opción de compra. El atacante, que aterrizo en el club blanquiazul el pasado verano cedido por el Spartak de Moscú, ha tenido poca participación en el equipo, jugando un total de 24 partidos entre liga y Copa del Rey, con un tiempo de juego de únicamente 644 minutos. A pesar de su historial goleador en otros clubes como el Cagliari Calcio y la UC Sampdoria, no ha logrado anotar ningún gol durante su estancia en el Espanyol, y sin duda es uno de los fichajes en los que pensaba el director deportivo blanquiazul cuando el pasado jueves hacía autocrítica reconociendo que no estaba nada satisfecho con el rendimiento de las incorporaciones hechas hace un año cuando llegó a última hora en una operación que despertó mucha ilusión entre la afición.
Ahora, Keita Balde regresará a su club de origen en Rusia, pero antes ha querido ratificar que a pesar de todo el Espanyol ha dejado huella en él; el futbolista, que como apuntaba el propio club en su nota de despedida desde el primer momento entendió a la perfección el sentimiento perico, envió un emotivo “Perico un día… ¡perico para siempre! Muchas gracias afición… muchas gracias club” que sin duda es más que un mero formulismo.
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