La opinión de Juan José Caseiro tras el Espanyol – Real Sociedad:
Derrota al ‘Kubo’
Para la medición de cualquier elemento, se usan diferentes unidades del Sistema Internacional. Vigente en casi todos los países y aplicable, porque no, a todas las competiciones, bien se podría decir que el metro cúbico, ese que se marca con un pequeño 3 sobre una ‘m’, nos señala los puntos que volaron injustamente en una derrota que fue elevada al ‘Kubo’.
Que conste en acta que fue Joan, el único que obligó a Remiro a usar las manos; la novedad de Kumbulla, que mostró recursos para su handicap en campo abierto desatornilló de esa zona a un Omar que se comió a su par. Cabrera parecía cómodo con la nueva pareja de baile y Romero sirvió para tapar primero el roto de la banda y después el descosido de la escasez de extremos.
El festival del humor arbitral le dio protagonismo a Gragera: le pitaban siempre falta. Král es el nuevo león de la cabecera de la Metro Goldwyn Mayer y Jofre estrenó los agravios del señor del silbato, ganándose una falta por poner la cara en un codazo.
¿El ataque? Completen la frase: oro parece, … Cardona se desconectó solo en tres toques en el que uno empeoraba al anterior; a Veliz parece que se le puede pegar libremente y casi hay que agradecer que no fuese expulsado y Puado, el que debe capitanear la escudería, sigue conviviendo mal con la ansiedad de los fallos.
Obedecían los cambios a la necesidad de refresco: a Brian le perjudicó el rebote que favoreció al japonés y Roca y Tejero no empeoraron a sus remplazos. Me paro en Aguado, que salió para decirnos que el sabe conducir un balón. Ya. ¿Sirvió? Y entre nosotros, ojalá pudiera sentarme un rato a charlar con Pere Milla. Y ver juntos sus videos. Ojalá.
Se jugó mejor, pero no es suficiente. Falta el eslabón que una la idea del entrenador y el desempeño de los buenos. Esa parte se llama calidad, que, en épocas peores, ¿se acuerdan de Falete? siempre nos sacó de estos trances. Eso depende del que tiene la cartera repleta de billetes. Quizá cuando despierte, alguien se lo cuente. Me quedo con algunos detalles en el verde. Vale la pena creer en la esperanza. Esa que es lo último que se pierde.
Juan José Caseiro
