El RCD Espanyol ha iniciado el mes de septiembre con una mezcla de alivio y expectación tras conseguir su primer triunfo de la temporada en La Liga EA Sports, al vencer al Rayo Vallecano por 2-1.
Este resultado no solo les ha dado los primeros tres puntos de la campaña, sino que también ha inyectado una dosis de confianza en un equipo que busca evitar los errores del pasado y afianzarse en la máxima categoría del fútbol español. Sin embargo, la alegría por este logro es solo un breve respiro antes de encarar un mes de septiembre que promete ser un verdadero desafío para los blanquiazules.

El Alavés de Luis García Plaza llega con la flecha para arriba
De entrada, el Espanyol recibirá al Deportivo Alavés en la quinta jornada de La Liga, un encuentro crucial para los pericos. El conjunto de Vitoria llega en un buen momento de forma y con dos victorias consecutivas en su haber, un 1-2 frente a la Real Sociedad en el derbi vasco y un sólido 2-0 frente a la UD Las Palmas en Mendizorroza. Estas victorias han reforzado la confianza del equipo, que parece haber encontrado su mejor versión, situándolo como un rival harto complicado en este tramo del calendario.

El ambiente en el RCDE Stadium estará cargado de tensión, no solo por la necesidad del Espanyol de sumar puntos, sino también por la tensa relación entre la afición perica y el técnico del Alavés, Luis García Plaza. Los de Manolo González saben que un triunfo ante el Alavés no solo sería un golpe de autoridad, sino también una manera de sumar puntos necesarios, teniendo en cuenta que los siguientes enfrentamientos elevan el listón de dificultad.
Visita al Santiago Bernabéu: la primera gran prueba
El siguiente reto del Espanyol no podría ser más exigente: enfrentarse al Real Madrid en el estadio Santiago Bernabéu. El equipo merengue, pese a que de momento no ha sido capaz de dar encaje a todas las piezas disponibles para Carlo Ancelotti, es sin duda uno de los colosos del fútbol europeo, no suele dejar escapar puntos en su campo y, con una plantilla repleta de estrellas, será un hueso duro de roer para los futbolistas dirigidos por Manolo González.

El Espanyol deberá estar concentrado al máximo, cerrando espacios ante la previsible avalancha ofensiva merengue y aprovechando cualquier oportunidad al contragolpe para intentar sacar algo positivo de la capital española. Sin duda, rascar algo positivo en un escenario donde no gana desde la 1995-96 y no rasca nada desde la 2012-13 (2-2) sería un gran logro, pero la calidad del rival hace que este sea un partido donde el Espanyol no tiene margen de error.
Villarreal en casa: la importancia de hacerse fuertes en el RCDE Stadium
Tras la complicada visita a Madrid, el Espanyol recibirá en casa al Villarreal, otro equipo que aspira a ocupar puestos europeos.

Hacerse fuerte en su campo es esencial para cualquier equipo que aspire a la permanencia como hace unos días destacaba el director deportivo Fran Garagarza, y, en este sentido, ganar al Villarreal que de momento no conoce la derrota en la competición, no solo sería importante en términos de puntos, sino también en cuanto a la moral del equipo y la afición.
Viaje a Sevilla: despedida de mes ante el Betis
El cierre del mes será igualmente complicado con un desplazamiento al estadio Benito Villamarín para enfrentarse al Real Betis. El equipo verdiblanco, dirigido por Manuel Pellegrini, es uno de los equipos que habitualmente tiene la vista puesta en Europa y cuenta con jugadores de calidad.

Pese a que han comenzado el curso con muchas duras y pobres resultados -suma dos puntos en las tres primeras jornadas -tiene un encuentro pendiente- después de sendos empates contra el Girona y el Alavés y la derrota contra el Real Madrid en la visita al Santiago Bernabéu, jugar en el Villamarín siempre es una tarea difícil, dada la atmósfera que crea la afición bética, el Espanyol deberá mantener la compostura y el enfoque para intentar llevarse algo de su visita a Sevilla.
Un mes para medir aspiraciones
Septiembre será visto lo visto un mes clave para el Espanyol, no solo por la calidad de los rivales a los que se enfrentará, sino también porque estos partidos podrían marcar la tendencia del equipo en la temporada. Si bien el calendario es sumamente exigente, lograr sumar puntos en estos encuentros podría ser un gran impulso en su lucha por la permanencia; por el contrario, una serie de malos resultados podría situar al equipo en una posición complicada antes de llegar a octubre. Lo cierto es que el Espanyol deberá mostrar su mejor versión, tanto en casa como fuera, para salir airoso de este exigente mes: la victoria ante el Rayo Vallecano ha sido un buen comienzo, pero el verdadero reto empieza ahora; el equipo está a punto de enfrentarse a un tramo de la temporada que pondrá a prueba su capacidad de reacción y su determinación. Con la vista puesta en estos duelos, los hombres de Manolo González y la afición blanquiazul saben que septiembre puede ser un mes decisivo cara al objetivo final, que no es otro que la permanencia.
