El RCD Espanyol ha dedicado un emotivo homenaje para 78 socios y socias con más de 50 años de antigüedad en el club, y dos socios en particular que han superado la impresionante cifra de 75 años de lealtad ininterrumpida. El evento, que ha tenido lugar en el palco Ángel Rodríguez, ha sido un tributo a décadas de compromiso, pasión y fidelidad a los colores blanquiazules, en una jornada marcada por la emoción y los recuerdos compartidos entre generaciones de aficionados. La ceremonia estuvo cargada de momentos especiales. No faltaron las lágrimas al recordar efemérides casi olvidadas, las sonrisas sinceras fruto de años de complicidad, ni las bromas y anécdotas intercambiadas entre amigos y familiares. Los asistentes vivieron una tarde que, más allá de un reconocimiento, se convirtió en una celebración de toda una vida dedicada al club. Para muchos, fue también una oportunidad de reencuentro con amigos de toda la vida y compañeros de tantas tardes de fútbol. El palco se vistió de gala para la ocasión, con la participación de personalidades del club como Mao Ye, CEO del RCD Espanyol, y otros rostros queridos en la historia perica como Rafa Marañón, consejero del club; Joan Capdevila, encargado de las relaciones institucionales deportivas; el exjugador Dani Solsona; Ramon Soley, en representación de la Fundació; y Ton Roig, presidente de la Federació Catalana de Penyes de l’Espanyol. Este homenaje no solo sirvió para agradecer a los socios su apoyo incondicional a lo largo de los años, sino también para reafirmar la importancia de transmitir el sentimiento blanquiazul de generación en generación. Un espíritu que, tras décadas, sigue tan vivo como el primer día.