El primer mercado de fichajes de Fran Garagarza como director deportivo del Espanyol, el de verano de 2023, prometía dar un impulso a un equipo destinado a luchar por el ascenso a Primera, objetivo que felizmente acabó convirtiéndose en realidad. Sin embargo, pasado el tiempo, los supervivientes de aquella ventana –Salvi Sánchez, Álvaro Aguado y Pere Milla- apenas tienen peso en la plantilla actual, evidenciando un pobre rendimiento que contrasta con las expectativas generadas.
Salvi Sánchez, inédito
A sus 33 años y con contrato hasta junio de 2025, Salvi Sánchez ha pasado totalmente desapercibido esta temporada. En las ocho jornadas disputadas hasta el momento, el de Sanlúcar de Barrameda no ha jugado ni un solo minuto, lo que supone un ostracismo alarmante para un futbolista que había sido protagonista en momentos clave del curso anterior. Durante el playoff de ascenso a Primera división, por ejemplo, participó en los cuatro partidos, pero este curso ha quedado relegado a un papel testimonial.
Bajo el mando de Manolo González, Salvi solo ha jugado ocho partidos -solo uno como titular- de los 24 posibles. Su pérdida de protagonismo es evidente, superado por una larga lista de nombres que le han adelantado en la rotación. El futuro de Salvi en el Espanyol parece más incierto que nunca.
Álvaro Aguado, de titular a suplente habitual
El centrocampista Álvaro Aguado, que finaliza contrato este año, tampoco ha logrado consolidarse en el equipo. Tras dos errores consecutivos que costaron goles ante Alavés y Real Madrid, Aguado fue suplente en el último partido ante el Betis, entrando mediada la segunda mitad. Antes, no había disputado ni un minuto frente al Villarreal, y su presencia en el campo ha sido más intermitente de lo esperado para un jugador que se consideraba clave.
Aguado solo ha sido titular en dos partidos, frente a Atlético y Alavés, lo que refleja su caída en la rotación. A menos que recupere el protagonismo en los próximos meses, parece que su etapa en el Espanyol podría estar llegando a su fin, ya que no se han reportado noticias cara a una posible renovación de su contrato.
La gran decepción: Pere Milla
Pere Milla, la gran apuesta de Garagarza en su primer mercado de fichajes, es quizás el caso más frustrante de todos. El delantero, que llegó al Espanyol por 2,5 millones de euros, más medio millón en variables, apenas ha tenido protagonismo este curso. Después de ser titular en el primer partido ante el Real Valladolid, ha sido relegado a un rol residual, jugando tan solo 3 minutos ante la Real Sociedad, 9 frente al Real Madrid y 35 contra el Betis, siempre desde el banquillo y en el encuentro del Villamarín por la lesión de Javi Puado.
El pobre rendimiento de Milla es difícil de justificar, considerando la inversión realizada en él y las expectativas depositadas. Con contrato hasta 2027, el Espanyol sigue buscando un retorno a su apuesta, pero hasta el momento, el jugador no ha respondido a las expectativas.
Un balance preocupante
El pobre desempeño de estos tres jugadores pone en entredicho la efectividad del primer mercado de fichajes de Fran Garagarza en el Espanyol. Salvi, Aguado y Milla, llamados a ser piezas clave del equipo, hoy parecen estar más cerca de la puerta de salida que de consolidarse en el once titular. El equipo necesitará más que fichajes mediáticos para cumplir con sus ambiciones, y la directiva deberá reflexionar sobre la planificación deportiva en futuros mercados.
La temporada es larga, y aún hay margen de reacción para los tres jugadores, pero su papel secundario hasta el momento es un indicativo preocupante del bajo rendimiento de los supervivientes del primer mercado de Garagarza.
