Actualización En La Grada Ràdio hemos actualizado la información sobre estos hechos, destacando que en estos momentos no hay ningún retenido entre la afición blanquiazul por los incidentes del Espanyol – Oviedo. Todas las personas identificadas prestaron declaración en sede policial, tanto en Catalunya como Astúrias, y posteriormente quedaron en libertad, pudiendo volver a sus respectivos domicilios. Además, a lo largo de la tarde hemos podido saber que concretamente fueron 17, doce del Espanyol y cinco del Oviedo. El operativo policial sigue abierto y no se descartan más detenciones; mientras, paralelamente compás de espera para que el juez cite a declarar a los ya detenidos el pasado 7 de octubre.
Detinguts 17 aficionats per una baralla tumultuària en la prèvia del @RCDEspanyol i @RealOviedo del passat juny.
L’enfrontament va consistir en llançaments d’objectes entre els dos grups d’aficionats i agressions físiques mútues.
Investigació coordinada amb @policia pic.twitter.com/J5x92R9HXI
— Mossos (@mossos) October 8, 2024
Esta riña entre aficionados radicales del Real Oviedo y seguidores del Espanyol tuvo lugar a las 5 de la tarde del pasado 24 de junio, en el paseo de los Ferrocarrils, en la localidad de Cornellà. Los hechos ocurrieron cuando ambas aficiones se encontraron en plena calle mientras los hinchas ovetenses se dirigían hacia el RCDE Stadium, según han informado este martes los cuerpos policiales implicados.
Los disturbios, que rápidamente se descontrolaron, incluyeron el uso de objetos contundentes como botellas, sillas, vasos y otros elementos del mobiliario de bares cercanos. Las agresiones no se limitaron a la calle, sino que también afectaron los alrededores, incluyendo una zona comercial cercana donde se encontraban personas ajenas al evento deportivo.
Uno de los heridos más graves fue un aficionado del Real Oviedo, que sufrió la rotura de un peroné y una brecha en la cabeza. A pesar de que otras personas resultaron lesionadas, varias decidieron no recibir asistencia médica para evitar ser identificadas por las autoridades.
La investigación policial, realizada conjuntamente por la Policía Nacional y los Mossos d’Esquadra, permitió identificar a un gran número de los implicados en la reyerta. Durante la mañana de este martes, cinco de los detenidos fueron puestos a disposición del Juzgado de Instrucción 1 de Oviedo, que ha dictado medidas cautelares que les prohíben acercarse al estadio Nuevo Carlos Tartiere durante los días de partido.
Este operativo está dirigido por el Juzgado de Instrucción número 3 de Cornellà y se enmarca dentro de las medidas para combatir la violencia en el deporte. LaLiga se ha personado como acusación particular en el proceso judicial.
La Policía Nacional ha detenido a cinco aficionados involucrados en los altercados ocurridos en la final del play-off de ascenso a Primera división entre el Espanyol y el Real Oviedo, disputada en el RCDE Stadium el pasado 24 de junio, según informa La Nueva España. Hasta el momento no ha trascendido la afiliación de los detenidos, es decir, si pertenecen al club blanquiazul o al asturiano, aunque podemos confirmar que entre ellos sí hay seguidores pericos. Todos ellos pasarán a disposición judicial mañana.
Los disturbios comenzaron poco antes del inicio del partido, cuando la afición del Oviedo, que había estado congregada en una plaza cercana al estadio, se desplazaba hacia el escenario del encuentro. Fue en ese trayecto cuando se desató la tensión. Según testigos a los que hace referencia el citado medio, algunos hinchas del Espanyol habrían empezado a increpar y lanzar objetos a los seguidores ovetenses, que no tardaron en responder, lo que provocó una serie de enfrentamientos; en su día, se comentó que durante el corteo de los seguidores asturianos, estos profirieron insultos a los seguidores pericos que encontraron en su camino. LNE destaca que solo una minoría de hinchas pericos participó en los altercados, mientras que otros aficionados del Espanyol mostraron su rechazo y condenaron los hechos.
Durante el caos, las fuerzas de seguridad, incluidos los Mossos d’Esquadra, intervinieron con cargas puntuales para dispersar a los aficionados más violentos. Pese a la tensión, no se registraron heridos de gravedad.
Más de tres meses después, las investigaciones han llevado a la detención de cinco de los presuntos responsables, quienes ahora enfrentarán las consecuencias legales de sus acciones.