El director deportivo del Espanyol, Fran Garagarza, dejó clara este sábado en su entrevista en El Periódico su intención de luchar por la continuidad de algunos de los jugadores cedidos que están destacando esta temporada. “¿Que se van a ir a final de temporada? Ya lo sé que se van a ir, pero por algunos vamos a pelear para que no se vayan”, afirmó. Estas palabras despertaron de inmediato la ilusión de la afición perica, que rápidamente pensó en dos nombres: el central albanés Marash Kumbulla y el mediocampista checo Alex Král, dos de los puntales del equipo que, además, se enfrentaron el viernes en la UEFA Nations League.

Rendimiento inmediato y clave en la lucha por la permanencia
Kumbulla, cedido por la Roma, y Král, prestado por el Union Berlin, llegaron en agosto y, pese al poco tiempo que llevan vistiendo de blanquiazul, han conseguido asentarse como titulares indiscutibles. Su impacto ha sido inmediato: el central albanés se ha convertido en el mariscal de la defensa y el mediocentro checo aporta equilibrio y despliegue en cada partido. Su nivel ha sido una de las grandes noticias para el Espanyol en este complicado inicio de temporada, en el que el objetivo es claro: la permanencia en la élite del fútbol nacional.

La intención de Garagarza de pelear por su continuidad encuentra eco en el deseo de la afición. Sin embargo, la realidad económica del Espanyol supone un obstáculo importante para retener a dos jugadores con tanto mercado. Desde Italia ya se ha especulado con la posibilidad de que el club catalán negocie con la Roma la compra de Kumbulla. Sin embargo, si el central mantiene este nivel, otros clubes también entrarán en la puja, complicando cualquier operación.

Garagarza, atento a Kumbulla y Král desde antes de su llegada
Pese a que ambos futbolistas tenían otras opciones sobre la mesa, el hecho de que hayan elegido al Espanyol este pasado verano es una señal positiva para el club. Ahora, tanto Garagarza como la afición esperan que Kumbulla y Král devuelvan la confianza apostando por continuar en Barcelona más allá de esta temporada, algo que podría ser factible vía nueva cesión o quien sabe si la situación financiera de la entidad perica mejora, vía compra, aunque es éste un escenario harto complejo. Queda mucho camino por recorrer y, como siempre, la economía será un factor decisivo. Sin embargo, la esperanza se mantiene viva. El Espanyol está dispuesto a dar la batalla para que estos dos pilares sigan liderando el proyecto en 2025.

