La de Carlos Romero ha sido una de las voces que hemos podido escuchar analizar lo sucedido entre Espanyol y el Barça. El futbolista blanquiazul, al que se ha visto muy afectado en el momento en que se ha rendido homenaje a los afectados por los efectos de la DANA -no hay que olvidar en que es valenciano- ha dado todo un ejemplo de profesionalidad en un partido en el que explica ha habido dos partes diferenciadas: “Es algo que hemos hablado al descanso, que no estamos orgullosos de cómo hemos salido los primeros minutos, había que poner más agresividad, también con balón, no estábamos cómodos y eso te merma y te resta confianza pero la charla nos ha venido bien, había que tirar de orgullo como nos ha dicho Manolo González, defender esta camiseta y este escudo como merecen en un derbi catalán al que le teníamos ganas. En la segunda parte se ha visto, hemos tenido más ocasiones, quedémonos con eso, en cómo hemos tirado de orgullo para defender este escudo como merece”.
Respecto a la situación que se vive en la Comunidad Valenciana, reconoce sincero que “lo he pasado muy jodido, doy las gracias a todos los que se han volcado con mi tierra, sobre todo a La Curva, la cantidad de cosas que van a mandar es increíble. Mandar un abrazo a todos los valencianos, me gustaría estar con ellos, a los que están levantando barro como mi familia, es lo que tendría que estar haciendo ahora mismo y me jode estar aquí jugando y no poder ayudar a los que de verdad lo merecen”.
El próximo sábado llega un partido vital precisamente contra el Valencia: “Hemos de ir a muerte desde el minuto 1, no podemos dejarnos nada más, tenemos que morir por cada balón, competir de verdad, es un partido a vida o muerte y hemos de sumar los tres puntos como sea, estoy convencido de que lo vamos a hacer”.