La contracrónica del Espanyol – Athletic Club, por Juan José Caseiro.
Empate a zarpazos
De la tribu de los dinkas, en Sudán, era Manute Bol, 231 centímetros de jugador NBA que nos dejó en 2010. Cuenta la leyenda que de joven, mató en defensa de su familia, a un león. Sin llegar a ese extremo, el objetivo de los espanyolistas era imitar esa hazaña, pero al picotazo de Roberto se opuso el zarpazo de Sancet, para dejar en tablas un duelo que me trae a Torrebruno con cambio de letra: pericos, leones, todos quieren ser los campeones.
A ojos del seleccionador, enésimo partidazo de Joan; a Omar no consiguieron doblegarlo y brilló más que nunca, Kumbulla libró bien los sofocones de la presión alta del rival con un Cabrera al por mayor en todas las vigilancias y un Romero que defendió bien e hizo compatible el saber atacar.
Urko leía que necesitaba el juego en cada momento, Pol, esta vez por anticipación, estaba continuamente robando las transiciones rivales y Kral montó la aduana para evitar la filtración de los especialistas rojiblancos entre líneas, hasta que le cambiaron de posición.
El mejor Jofre es cuando atacaba desencadenado, Puado brilló en labores oscuras y oscureció en ocasiones claras, donde Roberto se fabricó un ‘Juan Palomo’ en una de las clásicas cantadas de Unai Simón.
Cambios de cazadores para seguir controlando a las fieras: Calero incrustado en la contención, Roca para buscar las cosquillas de Yuri, Expósito intentando encontrar su mejor registro y Milla que se regaló tres filigranas, esta vez con utilidad. De Véliz, nada que reseñar, una vez más.
Empate y a seguir. Los vascos volverán a su tierra, pero en la nuestra seguirá habiendo un ‘León’ que anda suelto. Es fácil detectarlo: cabellera rubia, va de víctima y le acompaña un séquito de defensores que no conocen la dignidad humana. Responde al nombre de Mapi, pero no tiene garras. Solamente unas pezuñas que manchan para siempre aquello por lo que una vez nos dijeron que luchaban. Ya me perdonaran el final, pero quería apoyar a nuestra Daniela Caracas.
Juan José Caseiro