El ex futbolista Robi, que militó en equipos como el Espanyol, Elche, Castellón y Palamós durante los años 80 y 90, ha concedido una entrevista a José Luis Gual, Audio Country Manager de Flashscore. En ella, el ex defensa repasó su trayectoria, recuerda sus años en el fútbol profesional y analiza la situación actual del Espanyol con un discurso directo y sin rodeos.
“Parece que fue ayer, pero han pasado 40 años”
Han pasado ya varias décadas desde que Robi colgó las botas, aunque reconoce que el tiempo ha pasado volando. “Realmente, el tiempo pasa muy rápido y tan sólo lo aprecias cuando te pones a pensarlo. Parece que fue ayer pero ya han pasado alrededor de 40 años”, confiesa.
Natural de Barcelona, el ex jugador se formó en las categorías inferiores del Espanyol, aunque también dejó huella en otros clubes como el Elche, donde su carrera tomó un rumbo decisivo. “Realmente, mi faceta en el Elche ha sido la que ha marcado mi carrera. Yo pasé por todo el fútbol base del Espanyol, cuando jugábamos en todos los campos de Barcelona, donde no había infraestructura y era realmente difícil. Fui internacional, creo que fui el primer internacional del fútbol base del Espanyol juvenil sub 16 y llegué al primer equipo. Me subió Maguregui, toda una institución ahí en el Espanyol. Y luego Clemente ya me dijo que no contaba conmigo y me surgió la posibilidad de ir al Elche, donde he llegado a estar siete años”, explica sobre su trayectoria profesional.
Preocupación por el presente del Espanyol
El Espanyol vive tiempos complicados, en plena lucha por alejarse de la zona baja de la clasificación. Aunque la reciente victoria en Vitoria ante el Alavés ha dado un respiro al equipo en esta dura batalla, Robi no oculta que el camino que queda por delante a los blanquiazules aún es largo. “Realmente sí, estaba preocupado. Ahora empiezo a ver el camino despejado. Tengo relación con la entidad y con gente bastante involucrada, soy partícipe de los veteranos del Espanyol. De hecho, tenemos un grupo que los jueves bajamos a entrenar a la Ciudad Deportiva, hay bastante contacto directo y seguimos prácticamente el día a día del club. Veo que la senda se está despejando, pero ya conocemos lo que es el fútbol. La victoria el otro día en el campo del Alavés es importante, pero todavía, como dije, a partir del domingo faltan 13 puntos para respirar”.
El ex defensa lamenta la falta de estabilidad que ha afectado al club en los últimos años. “Cuesta digerir y más cuando no ves una estabilidad de los jugadores. Este año, con todos mis respetos, se han traído muchos cedidos debido a las posibilidades del club. Pero yo creo que hay una serie de personas allí que no han sabido gestionar. Porque fíjate la cantidad de jugadores grandes que han estado ahí, los delanteros centros que hemos sacado de ahí, los centrales hace muchos años que se sacaban de ahí, jugadores que ahora están en otros equipos destacando y no los hemos sabido rentabilizar. Entonces creo que en la gestión hay un eslabón que falla, porque los futbolistas que se fichan son buenos, pero no se rentabilizan, por lo que la persona que paga al final se cansa. Y también hay una serie de personas muy arraigadas en el club a las que no les dejan opinar. Yo soy muy amigo de Tommy N’Kono, creo que es una persona muy consecuente que conoce muy bien el club y creo que le deberían dar un poquito más de chance en los asuntos”.
“Nos estamos volviendo locos con los arbitrajes”
Robi también tien palabras para el arbitraje y el uso del VAR, un tema que sigue generando polémicas jornada tras jornada. “De hecho, hace dos años para el Espanyol el punto final y el punto clave fue el partido aquel en Valencia, nos cortaron ahí. Siempre lo tendré en la cabeza porque yo venía de ver el partido contra el Atlético de Madrid en casa, íbamos 0-3 y tuve que coger, marcharme del campo y al final cuando estoy subiendo al coche tiramos el penalti y empatamos a tres. Pero hubo una serie de malas decisiones de los árbitros y se está hablando demasiado. Estamos poniendo demasiadas normas en el VAR y estamos liando a todo el mundo. Durante toda la vida, en el fútbol las manos han sido manos y ahora si la mano está a la altura de la rodilla, de la mano toca todo el brazo, toca el suelo, ya no es penalti. Madre de dios, nos estamos volviendo locos con este asunto”.
Confianza en Manolo González
A pesar de los problemas estructurales del club, Robi cree que Manolo González es el entrenador adecuado para el Espanyol: “Totalmente, ha sido un acierto por parte del club. A Manolo lo conozco desde hace muchos años y yo no pensaba que estaría capacitado para llevar a gente de Primera, pero dos más dos nunca han sido cuatro en el fútbol. De hecho, pues ahí me he equivocado, porque está súper capacitado, ha sido un gran acierto del club tenerlo ahí. Pensaba que tenía que ser alguien que los jugadores creyeran más, pero veo que le creen a la perfección. Él tiene las ideas muy claras y realmente es a lo que tenemos que jugar y tal y como estamos jugando es la única manera hoy en día de poder mantener la categoría”.
Recuerdos de una final de la UEFA
Finalmente, el ex jugador recuerda la final de la Copa de la UEFA de 1988 que el Espanyol disputó contra el Bayer Leverkusen, una cita histórica que el club perico rozó con las manos: “Son 38 años, yo me marché con 22. Eran mis compañeros, yo estuve entrenando con ellos, llegó Clemente allí y él dijo que no contaba conmigo. Entonces yo me tuve que buscar la vida y me cedieron un año al Elche y luego, al año siguiente, el Elche me compró. Cuando llegué al vestuario del Elche me impactó mucho más. No es lo mismo estar dos años con gente como Tommy N’Kono, Lauridsen, Zúñiga, Job… Bueno, unos pedazo de jugadores, imagínate, Jiménez, el Nanu Soler que estaba en la reserva conmigo. Jugábamos en el mismo lado en el lateral izquierdo. Yo creo que podíamos haber hecho una dupla perfecta, yo a cubrirle las espaldas de lateral izquierdo y a dejarle a él todo el carril porque era un portento físico. Pero las cosas vienen así y bienvenidas sean, tuvo que ocurrir. Así que el tiempo pasa y al final eso no depende de nosotros”.
Con la perspectiva que dan los años, Robi sigue vinculado al fútbol y al Espanyol, al que observa con el cariño y la preocupación de quien lo ha vivido desde dentro. Sus palabras, teñidas de nostalgia y también con un punto de crítica, son las de un ex jugador que sabe lo que significa defender la blanquiazul y que, como tantos pericos, sigue esperando tiempos mejores.