El debate sobre la relación entre Espanyol y Girona sigue encendido, y en La Opinión del Día de La Grada Ràdio , Ricardo Martínez dejó algunas frases que no pasaron desapercibidas. Con un estilo directo y sin filtros, este perico que nos sigue desde México repasó lo que significa este enfrentamiento y puso en su sitio a quienes intentan equiparar a ambos clubes.
Dejar atrás el pasado ‘aspirina’
El Espanyol ha sido, en demasiadas ocasiones, ese equipo que resucita a los rivales. Pero Martínez cree que eso debe quedar atrás:
“Además de ver quién es el rival, tenemos la oportunidad de seguir dejando de ser el equipo aspirina, como éramos en años anteriores en que no hubiésemos ganado ante el Alavés. Una derrota ante el Girona puede costarnos un poco de vergüenza, y debilidad por ser en nuestro fortín, pero poca cosa más.”
Aquí, el mensaje es claro. Durante años, el Espanyol ha sido experto en regalar puntos a equipos en crisis, un mal endémico que ha desesperado a la afición. Y sí, perder en casa ante el Girona dolería, pero no cambiaría la realidad: ellos siguen siendo un equipo con cinco temporadas en Primera, mientras que el Espanyol es historia viva del fútbol español.
El peso de la historia no se compra
Uno de los momentos más contundentes de su intervención llegó cuando recordó la diferencia entre el Espanyol y el Girona en términos de historia y grandeza:
“Aún tenemos un paraguas de más de 100 años de historia para ser pequeños como ellos, y si los descendientes de Chen se quedan destrozando al Espanyol y los de Roures y Guardiola se quedan dando apoyo al Girona nos superarán en el 2350.”
Martínez ironizó con la idea de que el Girona pueda adelantar al Espanyol en importancia, algo que solo podría ocurrir en un futuro lejano… y si el club blanquiazul sigue bajo una gestión nefasta. Pero más allá del chascarrillo, dejó claro que la historia no se puede fabricar con un par de buenas temporadas y dinero extranjero. El Espanyol tiene un legado que no se borra con petrodólares ni inversiones oportunistas.
Una victoria que dolería en Montilivi
Si la derrota no significaría demasiado, la victoria sí que podría calar hondo en el Girona:
“Pero una victoria del Espanyol sí que fastidiará a los giroculés, que son lo mismo a fin de cuentas, y los pondrá en su lugar. Son un equipo pequeño que está en su quinta temporada en Primera en su historia, es curioso cómo se escuchan hasta aquí los llantos por un equipo que se supone que no importa porque es el Espanyol, al final los tenemos cogidos y les damos más miedo de lo que pueden aceptar.”
El espejismo del Girona
Por último, Ricardo Martínez comparó el auge del Girona con otros proyectos efímeros del fútbol español:
“Al final el Girona es un equipo sobrevalorado, dopado que acabará pinchando como el Málaga, aunque la diferencia con los andaluces es que sí tienen una historia, una afición y un sentido de pertenencia. La historia no se compra, depende de qué equipo esté arriba en la clasificación se pondrán la camiseta del Barça o del Girona, espero que el martes se pongan la del Barça.”
El paralelismo con el Málaga es inevitable. Un equipo que parecía destinado a asentarse en la élite… hasta que el castillo de naipes se derrumbó. El Girona podría seguir ese camino si algún día le cortan el grifo. La diferencia es que, mientras el Málaga tiene raíces y un sentimiento detrás, el Girona es un club sin una identidad clara, con una afición que cambia de colores según sople el viento.