Carlos Romero está en el escaparate, y por tanto en el punto de mira de diferentes clubes para los que no está pasando desapercibido su papel este curso como perico. El crecimiento del lateral zurdo del Espanyol, cedido por el Villarreal el pasado verano, es evidente; se ha convertido en una pieza clave para Manolo González en este tramo de curso, y eso no ha tardado en llamar la atención de las secretarías técnicas. Según Mundo Deportivo, el Betis ya le ha echado el ojo, pero no es el único: desde Alemania también estarían pendientes de sus pasos; FCBNoticias añade que podría ser el tapado del Barça, si el Villarreal lo pone en el mercado por un precio asequible, quizás cercano a los 10 millones, para pelearle el puesto a Alejandro Balde.
A sus 23 años, Romero está demostrando que tiene lo necesario para competir al máximo nivel. En los partidos grandes, como contra el Real Madrid, ha dejado claro que no se arruga, que es un futbolista con carácter, y que sabe cuándo dar un paso adelante, y eso, evidentemente, gusta y mucho.
Ahora, entrando en el último tercio de la temporada de Primera, comienzan a plantearse diferentes incógnitas respecto a su futuro y sobre qué pasará con él el próximo junio, cuando acabe en principio su etapa a préstamo en el Espanyol. Hay que recordar que su cesión al club blanquiazul no contempla una opción de compra, así que los pericos no tienen ninguna garantía de poder retenerlo una segunda temporada. El Villarreal, que es el dueño de sus derechos, tendrá que decidir llegado ese momento qué hacer con él. ¿Le hace sitio en su plantilla? ¿Le busca otra cesión? ¿Aprovecha el interés de otros clubes para hacer caja?
Son evidentemente muchas preguntas y todavía hay pocas respuestas. Lo que sí está claro es que Carlos Romero ha demostrado ser un futbolista con condiciones y también un evidente margen de crecimiento y que está dotado de un plus de versatilidad que los responsables de confeccionar las plantillas de los equipos valoran mucho a la hora de elegir. Ahora, toca esperar a ver qué decide el Villarreal, que es evidentemente quien tiene la última palabra. Mientras tanto, el jugador valenciano sigue a lo suyo: aprovechando los minutos que la da Manolo González, jugando, creciendo y llamando si hacemos caso de estas informaciones la atención de más de un equipo.
