Regresa la Champions para el Barcelona y lo hace de la forma más dulce posible. En medio de un calendario tormentoso, tener en este tramo de la temporada, un partido poco exigente puede ser realmente decisivo de cara al futuro. A solo 11 días de la gran final de la Copa del Rey ante el Real Madrid, Hansi Flick va a poder permitirse el lujo de introducir alguna novedad en el once de esta noche ante el Borussia Dortmund. Además, con la mala noticia de la lesión de Balde, el club azulgrana no quiere sufrir una nueva lesión que, en cualquier caso, sería definitiva para estar en Sevilla el próximo sábado.
El Barcelona, con la tranquilidad del 4-0
La situación deportiva entre Real Madrid y Barcelona se resume en cómo llegan ambos equipos al partido de vuelta de estos cuartos de final de la Champions. Mientras que el Real Madrid sueña con otra noche épica en el Bernabéu, los azulgranas simplemente se preparan para salir a acabar con un trámite que lleva resuelto desde el pasado miércoles. Con una superioridad abismal entre ambos equipos, los de Hansi Flick, cumplieron con las expectativas para, desde el principio, poner tierra de por medio para intentar dejar encarrilada la eliminatoria antes de ir al “infierno alemán”. Dicho y hecho. El Barcelona, en modo apisonadora, acabó con cualquier esperanza germana. Sin duda, unas excelentes noticias para un equipo que se va a permitir afrontar con tranquilidad este encuentro. Siempre eso sí, manteniendo la calma para evitar un desastre como los de Roma o Anfield. Precisamente, en esta misma ronda sufrió aquella en Italia en la que llegaban con un 4-1 de la ida.
Calendario asequible antes de la final de Copa
Lo que significa hacer los deberes. Ahora, el equipo azulgrana se puede permitir el lujo de afrontar con tranquilidad los días previos a lo que será una semana clave en la temporada. Con un partido relativamente decidido antes de empezar, lo próximo para los culés invita a ser optimista. Con dos encuentros ligueros como locales, los de Flick esperan llegar a la final de Copa con ese +4 de diferencia en la competición liguera. Lo próximo en Liga, Celta y Mallorca. Los vigueses, el próximo sábado a las 18:15 y los de Jagoba que lo harán en la jornada intersemanal, disputando ese partido el martes a las 21.30. Cuatro días antes de la gran final de La Cartuja. Tiempo suficiente para dar descanso a los jugadores y poder hacer rotaciones en los tres partidos, incluido este ante el Borussia Dortmund.
Todo lo contrario que el Real Madrid. Los de Ancelotti, abonados a la esperanza para una nueva épicidad, tendrán que tener una “batalla” durísima si quieren estar en la siguiente ronda. Sin margen de error, los blancos necesitan remontar el 3-0 de la ida para estar en semifinales. Además, los dos siguientes compromisos no serán demasiado asequibles. Athletic Club y Getafe serán los siguientes rivales. Los bilbaínos, el próximo domingo en el Santiago Bernabéu mientras que la visita al Coliseum será el miércoles. Tres días antes de la final copera. Es decir, los de Ancelotti tendrán un día menos de descanso. Sin duda, dos calendarios muy diferentes para ambos.
