Y en medio de todo lo que gira en torno a Real Madrid y Arsenal tras esa eliminatoria, el Inter vuelve a ser el eterno tapado. Los italianos, tras superar una eliminatoria realmente igualada y entretenida, vuelven a meterse en semifinales de la Champions después de dejar por el camino a un Bayern de Múnich que por momentos rozó la remontada. Sin embargo, Lautaro, la ley del ex con el gol de Pavard y el gafe de Harry Kane decantaron una eliminatoria que vuelve a dejar a los de Simone Inzaghi entre los cuatro mejores de Europa.
Lautaro es mucho Lautaro
Un partido que tuvo absolutamente de todo. Pese al 1-2 de la ida, el Bayern salió con la idea muy clara de darle la vuelta a eliminatoria y aunque los italianos respondieron bien en la primera mitad, Harry Kane metió el miedo en el cuerpo a los pupilos de Inzaghui. Sin embargo, este Inter tiene mucho carácter. Un sentimiento reflejado en un Lautaro que es el alma del equipo. De nuevo, como ya ocurrió en la ida, volvió a dejar su sello tras aprovechar varios rechaces tras un córner. Su gol, el segundo del enfrentamiento ante los alemanes, volvió a poner por delante al cuadro italiano. Después, Pavard, aprovechando la ley del ex puso lo que por momentos parecía, la puntilla tras un gol, de nuevo tras un córner. Y digo parecía porque Dier, en el 76′ dejaba a los bávaros a un solo gol de igualarlo y mandarlo a la prórroga, aunque ese gol no acabó llegando.
Los de Inzaghi vuelven dos años después a unas semifinales y sueñan con volver a una final como ya ocurrió en la 22/23, temporada en la que cayeron ante el Manchester City (1-0) en la final de Estambul. Unas semifinales que permiten además, intentar luchar por revalidar el triplete, como ya ocurrió en la temporada 2010 con José Mourinho en el banquillo italiano.
El triplete en el horizonte para el Inter
Quizá suene demasiado optimista, pero este equipo, tiene a tiro pelear por ese sueño. Líderes en el Calcio, a falta de seis jornadas, aventajan en 3 puntos al Napoles, único rival en la terna por ser campeón de la Serie A. Es quizás, el título que más cerca tienen, más aún si miramos los números de los italianos. En la Copa de Italia, pelean con el Milan por un puesto en la gran final. Tras el 1-1 de la ida, este próximo miércoles buscarán ese puesto en la final. Y por último, el sueño de una nueva Champions. En semifinales, ahora llega el hueso más duro. Un Barcelona que se muestra como el gran favorito para conquistar la orejona. Sin embargo, los italianos se agarran a su defensa y a esa vuelta en el Giussepe Meazza que puede ser decisivo para la eliminatoria. Un escenario que ya conoce el Inter y que se vuelve a repetir como ya ocurrió en la 2009-2010, cuando los de Mourinho vencieron en aquella eliminatoria recordada por los aspersores.
Kane, al límite
En la otra acera, un Bayern que vuelve a ser una de las decepciones de esta edición. Con una final en su estadio, el batacazo ante los neroazurri deja al equipo germano con la obligación de salvar la temporada con la Bundesliga. Un título al que se agarra el equipo y sobre todo, Harry Kane. El delantero inglés sigue con su gafe y se aferra a este título para acabar con ese mal fario que le acompaña desde el inicio de su carrera. Sin un título colectivo, la Bundesliga puede ser su salvación ante otra temporada muy complicada en lo conjunto.
