Quién nos lo iba a decir. Hace apenas dos temporadas, Joan García calentaba banquillo y muchos lo veían como otro canterano más que acabaría marchándose del Espanyol por la puerta de atrás, sin hacer ruido. Hoy, es todo lo contrario: el ruido a su alrededor es ensordecedor, pero desde fuera del RCDE Stadium. Porque Joan ya no es una promesa. Es una realidad. Una de las grandes. Y ahora que medio continente lo quiere, la afición del Espanyol se enfrenta a una pregunta que duele solo de formular: ¿cuánto vale perder a tu jugador más valioso?
Joan García no solo ha sido el portero con más paradas de LaLiga —127 en 32 partidos—, sino el auténtico sostén de un Espanyol que ha vivido más días de sufrimiento que de fiesta esta temporada. Ha dejado su portería a cero en siete partidos, ha salvado puntos imposibles y se ha ganado el cariño de una afición que, por fin, puede presumir de tener uno de los mejores porteros de Europa… hecho en casa.
Y claro, cuando alguien brilla así, los focos se giran. Y con los focos vienen los clubes. Y con ellos, vienen las cifras.
Este martes, en La Grada Ràdio, Francesc Via no se anduvo con rodeos: “El interés del Barça por el portero del Espanyol es cierto”. Pero también dejó claro que la cosa no va a ser sencilla. Primero, porque “Joan deberá aceptar ir al club azulgrana”, y segundo, porque “el club lógicamente en este caso no negociaría con el club azulgrana, por lo que deberían hacer frente al pago íntegro de la cláusula de rescisión”. Es decir: si el Barça lo quiere, que venga con los 25 millones por delante. Y aún así, cuesta imaginar a Joan con ese escudo.
Mientras tanto, el Arsenal parece mejor posicionado. Se habla incluso de un preacuerdo. Aunque, como bien apunta Via, “ante la avalancha de novias que están apareciendo interesadas en hacerse con Joan García, es de esperar que ese acuerdo no sea firme y pueda abrirse una subasta para obtener la mayor cantidad económica posible”. Y es que el interés de clubes como Bournemouth, Aston Villa, el Real Madrid o equipos alemanes ha hecho que todo se recaliente.
¿Qué dice el mercado?
Según Transfermarkt, Joan está valorado ahora mismo en 20 millones de euros, una cifra que lo coloca como el jugador más valioso del Espanyol. Si lo comparamos con los porteros top del continente, aún está un escalón por debajo de nombres como David Raya o Gregor Kobel (valorados en 40 millones), pero su juventud y proyección apuntan alto. Muy alto.
Si finalmente Luis de la Fuente lo convoca con la absoluta, su cláusula subiría hasta los 30 millones. Y en ese caso, Joan se convertiría en uno de los diez porteros más caros de la historia del fútbol igualado con Giorgi Mamardashvili y Manuel Neuer. Asimismo, si solo se contemplan los traspasos de arqueros nacionales, Joan García sería el tercer portero español más caro de todos los tiempos. Nada mal para un chico que hace dos años apenas ni siquiera tenía minutos y que hoy está en boca de todos.
Más que cifras
Pero más allá de lo económico, hay algo que pesa incluso más en Cornellà-El Prat: el valor sentimental. Joan representa lo que todos soñamos cuando hablamos de cantera, de identidad, de sentimiento. Es un chico de la casa, humilde, trabajador, que ha sabido esperar su momento sin alzar la voz y, cuando ha llegado, ha respondido con actuaciones de otro nivel. Y eso, en un club como el Espanyol, no se mide en euros.
Sabemos que en el fútbol moderno cuesta retener a los buenos. Y que, cuando los gigantes llaman, y más en la situación de necesidad económica del Espanyol, es difícil decir que no. Pero si Joan acaba saliendo este verano —algo que, por desgracia, parece inevitable—, el club tiene la obligación de vender caro. No solo porque lo vale, sino porque lo merece. Que el traspaso, si se da, esté a la altura del jugador. Porque Joan García, que también se ha ganado el derecho a decidir su destino, no es solo el mejor portero de LaLiga esta temporada. Es uno de los nuestros. Y eso, para nosotros, no tiene precio.