Este lunes, La Grada Ràdio ha reunido en su tertulia a un grupo de voces con criterio propio y cero pelos en la lengua: Luis Leirós Huracán Envidia, Àngel Bergadà, Carlos Latorre y nuestro compañero Àlex Cobas. Y entre valoraciones, llamadas de oyentes y algún que otro tirón de orejas, lo que ha quedado claro es que, aunque el equipo no termina de cerrar su permanencia, el nivel de preocupación no es precisamente alarmante.
Una preocupación que no pasa del 4
Luis Leirós fue, seguramente, el más crítico con el momento actual del equipo. No tanto por lo que se ve en la clasificación, sino por las sensaciones: “Parece que vamos muy bien, luego aflojamos, en fin… me gustaría haberlo tenido solucionado desde hace días, lo estamos alargando”. Eso sí, no esconde que el hecho de que el resto de equipos tampoco estén sacando resultados ayuda a mantener cierta calma: “También es cierto que los demás no sacan puntos, y es lo que me da tranquilidad, por eso mi nivel de preocupación es un 4”.

Luis, además, dejó una reflexión que va más allá de los números, sobre el estilo y la esencia del equipo: “El Espanyol que me gustaba era el de otras épocas, vi jugar a mucha gente con mucha clase y categoría, y cuando ensalzamos a Jofre por su esfuerzo, hay que recordar que juegan futbolistas, no torneros ni fresadores, y están para jugar”. Una frase que, sin duda, va a hacer ruido en la grada.
Bergadà, Latorre y Cobas: confianza total
En el otro extremo del termómetro estaban Àngel Bergadà y Carlos Latorre, que coincidieron en mostrar un optimismo total. Para Bergadà, la derrota ante el Betis no fue ningún drama: “Perdimos contra un Betis muy superior a nosotros, que en algunas fases nos pasó por encima […] y pese a ello ganábamos a falta de 8 minutos”. Y remató con un mensaje de seguridad: “Quien ha de estar preocupado el próximo partido es el Leganés, no el Espanyol. Mi nivel de preocupación es 0”.

Latorre fue en la misma línea: “Nivel de preocupación cero; os tenéis que situar en enero, después de perder en Girona, la preocupación era 9,5, y ahora sólo hay que ver lo que queda a nivel de calendario. Preocupación cero”. Lo dijo sin rodeos, seguro del rumbo que ha tomado el equipo en la segunda vuelta.
Àlex Cobas, por su parte, tampoco dramatizó, aunque se permitió un ligero margen: “Mi nivel de preocupación es un 1”. Un poco más prudente, pero lejos del alarmismo.
El termómetro de la afición, encendido
También se abrieron teléfonos a los oyentes, y aunque las opiniones fueron variadas, el resumen de la tertulia deja una sensación generalizada de cierta preocupación. Pese a que los números dicen que el equipo terminará cumpliendo el objetivo, también queda claro que no todo el mundo se conforma con sobrevivir. Hay quien, como Leirós, echa de menos algo más de calidad, de identidad y de ambición, insistiendo que aunque hoy duerma relativamente tranquilo, sigue exigiendo que este club vuelva a parecerse al que creció admirando.