Javi López (Osuna, 1986) ha anunciado oficialmente su retirada del fútbol profesional. Lo hace a los 38 años, después de varias temporadas en el Adelaide United de la A-League australiana, donde puso punto y final a una larga carrera marcada por su paso por el RCD Espanyol, club al que llegó en 2007 y al que estuvo vinculado durante trece años, convirtiéndose en una de las figuras más constantes y representativas del vestuario blanquiazul durante la última década.
Javi López anuncia la seva retirada.
Després de 13 anys al Club, amb 11 temporades al primer equip i 283 partits oficials disputats, et vas convertir en un exemple de compromís, entrega i orgull blanc-i-blau.
Mucha suerte en esta nueva etapa, @JaviLopez16 🤍💙. #RCDE pic.twitter.com/ahMoyLeARg
— RCD Espanyol de Barcelona (@RCDEspanyol) May 13, 2025
El jugador andaluz disputó 283 partidos oficiales con el Espanyol, repartidos entre Liga (252), Copa del Rey (23) y competiciones europeas (8), con un total de tres goles anotados. Su versatilidad en el campo —capaz de actuar como lateral, central o mediocentro—, su continuidad a lo largo de distintas etapas del club y su compromiso lo llevaron a portar el brazalete de capitán durante cinco temporadas.
Su salida del Espanyol, en el verano de 2020, se produjo en un contexto complicado. Tras el descenso a Segunda división, el club decidió rescindir el contrato que le vinculaba hasta 2021, una renovación que había sido firmada apenas unos meses antes, tras el parón por la pandemia. La decisión se enmarcó dentro de la reestructuración del primer equipo, aunque generó cierta incomodidad por las formas y el momento.
Pese a aquella despedida abrupta, Javi López nunca ha ocultado su amor por el Espanyol, ni su orgullo por haber formado parte de la historia del club. Lo ha expresado públicamente en numerosas ocasiones, también durante su etapa en Australia, donde siempre se ha referido al Espanyol como el club de su vida.
Los primeros meses en la A-League no fueron sencillos, pero con el paso del tiempo logró adaptarse y volvió a disfrutar del fútbol, esta vez alejado del foco mediático. En un entorno más tranquilo, Javi encontró el espacio para cerrar su carrera de forma más natural, sin la presión que acompañó sus últimos años en Barcelona.
Su trayectoria en el Espanyol le sitúa como el octavo jugador con más partidos en Primera División en la historia del club. Una cifra que refleja su peso dentro del grupo y su constancia en un periodo marcado por cambios institucionales, deportivos y de identidad en la entidad.
Con el anuncio de su retirada, se cierra el capítulo profesional de un futbolista que, sin grandes titulares ni estridencias, ha representado con fidelidad el perfil de jugador comprometido con el escudo y con su responsabilidad dentro del equipo. Aunque ya hace años que no viste la blanquiazul sobre el césped, en el imaginario colectivo perico sigue siendo —y seguirá siendo— una de las figuras más reconocibles de una etapa reciente que, con sus luces y sombras, forma parte de la memoria reciente del club.
