El portero Joan García ha reaparecido en público este jueves y lo ha hecho por primera vez hablando ya abiertamente como futbolista del FC Barcelona. Lo ha hecho ante los micrófonos de Jijantes, a la salida del restaurante Erre & Urrechu del Hotel Torre Melina de la capital catalana, donde ha celebrado el inminente cierre de su fichaje acompañado por su pareja, su agente Juanma López y el jugador Dani Olmo, que también se incorporará al conjunto azulgrana este verano.
“Estoy contento, muy contento, yo también tengo muchas ganas (de firmar el contrato con Joan Laporta) y estoy muy contento”, han sido sus escuetas declaraciones. Un mensaje en el que repite hasta tres veces su entusiasmo y que contrasta con la enorme decepción que ha generado su marcha en el entorno del Espanyol, club en el que se formó y al que ha pertenecido desde categoría cadete.
El acto protocolario de la firma con Joan Laporta está previsto para las 13:00 horas de hoy, y servirá para oficializar un contrato que unirá al guardameta con el FC Barcelona hasta el año 2031. Sin embargo, más allá del plano institucional, sus palabras han llegado en un momento de profunda tensión emocional para la afición del Espanyol, que todavía digiere con dificultad tanto el contenido como las formas de su salida.
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🤩 Primeras palabras de Joan Garcia como jugador del Barça: “Estoy muy contento y con muchas ganas”
El portero catalán firmará este viernes su contrato hasta 2031 junto al presidente Joan Laporta.
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— Jijantes FC (@JijantesFC) June 19, 2025
En las últimas horas, varias personalidades vinculadas al club blanquiazul han expresado abiertamente su malestar. Una de las más contundentes ha sido la del expresidente Joan Collet, que en declaraciones al programa El món a RAC1 ha sido muy claro: “Me jode mucho que Joan García haya ido al rival que, por desgracia, no es un rival deportivo, pero sí social. Y las maneras no han sido las correctas. Ha engañado a compañeros de vestuario, al entrenador y a la afición… Se ha ido junto al monstruo”.
Tampoco ha pasado desapercibido el mensaje que publicó el economista y aficionado perico Gonzalo Bernardos en sus redes sociales, en el que acusa directamente al jugador de haber faltado a la verdad: “Tú sabrás por qué has mentido tanto a tantos. En pocos días, para los niños has pasado de ser un ídolo a un gran traidor. Era completamente innecesario”.
El trasfondo del malestar no se centra exclusivamente en el hecho de que Joan García haya fichado por el eterno rival. Lo que ha encendido los ánimos es, sobre todo, la gestión del proceso: la negociación con el Barça se habría producido mientras el jugador negaba que esa fuese su elección dentro del vestuario. De hecho, apenas unas semanas antes de cerrar el traspaso, besó el escudo ante una grada entregada tras la victoria ante Las Palmas, en la que sería su última gran noche como blanquiazul.
El Espanyol ingresará 26,34 millones de euros por el pago de su cláusula de rescisión, lo que supone una operación importante a nivel económico. Pero más allá del impacto financiero, lo que queda es una sensación de decepción en un sector amplio de la afición, que ve cómo uno de los jugadores más representativos de la cantera perica abandona el club en su mejor momento y en dirección al club que representa la antítesis del sentimiento blanquiazul.