Con la salida de Joan García rumbo al Barça aún fresca, la portería del Espanyol vuelve a abrirse en canal. Y uno de los que alza la mano con fuerza es Ángel Fortuño, que este viernes ha hablado para los medios oficiales del club con una mezcla de prudencia, ganas y ese punto de ilusión que siempre tiene quien sabe que se le presenta una oportunidad.
“Con muchas ganas”, decía de primeras, sin esconder que esta pretemporada se vive de forma especial. “Al final es una temporada muy ilusionante para todos, para mí también”, apuntaba el joven meta, que encara el curso con la confianza de quien lleva años formándose en casa y sabe que le llega su momento. “El grupo está construyendo ahora una base sólida, y confiamos en que puede ser una temporada muy ilusionante”, insistía, como queriendo dejar claro que no hay motivos para el pesimismo.
Preguntado por lo vivido el curso pasado, Fortuño prefería mirar hacia adelante sin olvidar del todo el pasado: “Hemos de quedarnos con la parte positiva, que conseguimos el objetivo, y este año queremos dar un paso más y veremos hasta dónde podemos llegar”. Sin prometer milagros, pero con ambición.
Sobre cómo ve al equipo en este inicio de verano, el mensaje fue claro: “Es verdad que aún tenemos una base del año pasado, que quedamos bastantes y han venido unos cuantos. Hay buena sintonía entre todos, bastante jóvenes, nos llevamos muy bien entre todos, y los veteranos también aportan lo que saben”. Una declaración que refuerza la idea de que hay vestuario, hay química y hay unión.
¿Y los objetivos? Aquí Fortuño pisó terreno seguro: “Veo al equipo con muchas ganas de afrontar la temporada. Al final, primero tenemos que conseguir el objetivo principal y después ya veremos hasta dónde podemos llegar”. Ni se mojó de más ni se quedó corto. Sabe que el Espanyol no está para lanzar las campanas al vuelo, pero también que este año hay más herramientas y un nuevo impulso desde la propiedad.
Sobre el primer test serio de la pretemporada, el duelo contra el Peralada, Fortuño fue directo: “Llevamos casi dos semanas entrenando y lo que queremos es competir, recuperar sensaciones y jugar partidos, jugar minutos”. Como buen portero formado en la Dani Jarque, no pierde el foco ni aunque sea un amistoso de julio: “Estas semanas hemos trabajado más físicamente que tácticamente, pero hay tiempo para trabajar de todo y eso es lo que hacemos para trabajarlo en el partido”.
Fortuño no alza la voz, pero manda el mensaje. Con la marcha de Joan, y la llegada de un veterano como Dmitrović, sabe que parte como tapado. Pero también sabe que el camino se anda bajo palos, y que si se le da una oportunidad… él está más que listo.