El Espanyol perdió la final de la Copa Catalunya por penaltis. El cuadro perico, que finalizaba esta misma mañana su ‘stage’ en Navata, viajó al Estadi Nova Creu Alta de Sabadell para medirse al Girona en la final de la Copa Catalunya. Bajo la atenta mirada de Alan Pace en la grada, Manolo González dibujó un once que estaría cerca a ser el titular: Fortuño iniciaba bajo palos; Rubén ocupaba el carril diestro y Carlos Romero el izquierdo, mientras que Omar, Calero y Cabrera cerraban la zaga; Terrats y Pol Lozano formaban la medular; Antoniu Roca y Puado acompañaban a Kike García en ataque. El arranque de partido vislumbró un Espanyol con un rol reactivo: los blanquiazules, con un 4-4-2 muy marcado, defendían atrás y trataban de aprovechar el error local para generar al espacio. Aunque el Girona tenía el protagonismo con balón, las posesiones eran de un carácter bastante estéril que no lograban encontrar fisuras en el esquema perico. Sin embargo, en dos despistes blanquiazules, el cuadro gerundense tuvo dos ocasiones claras: Asprilla primer y Tsygankov después tuvieron situaciones de remate desde dentro del área, pero ambas fueron desbaratadas por un seguro Fortuño.
En la primera media hora el Espanyol, que no estuvo muy bien plantado, apenas se asomó al campo visitante a excepción de un par de contraataques que no trascendieron. El Girona, por su parte, que estaba mejor sobre el verde, lograba generar peligro en acciones puntales, aunque sin acierto en los últimos metros. Con el paso de los minutos, los rojiblancos fueron mejorando y asomándose cada vez más al área perica, la cual estuvo bien defendida por la zaga y un seguro Fortuño. El descanso fue la mejor noticia para los de Manolo, que pese a la mejora gerundense, llegaron al intermedio con 0-0.
@mongay_photography
El reinicio deparó sorpresas: el Girona cambió prácticamente todo su once mientras que Manolo no hizo ni un cambio. El guion del choque, pese al descanso, siguió el curso establecido en la primera mitad: los visitantes dominaban la posesión ante un Espanyol que no se acababa de encontrar sobre el verde. Manolo, para revertir la situación, realizó cinco modificaciones y dio entrada a Miguel Rubio, Jofre, Pere Milla, Roberto y Edu Expósito. Justo después, Cabrera -recién sustituido- fue expulsado por protestar. El equipo mejoró ligeramente y el técnico espanyolista agitó más el avispero y dar descanso a los futbolistas más cargados: entraron Hinojo, José Salinas, Pablo Ramón, Rafa Bauza y Leo Salazar. Gracias a los cambios, traducidos en energía renovada, el equipo fue en una línea ligeramente ascendente y Roberto tuvo dos ocasiones claras de gol que no encontraron puerta.
En el tramo final de partido, el Espanyol se hizo con el partido y comenzó a asomar la cabeza. Primero, Pere Milla tuvo la ocasión más clara del partido al cabecear un centro que se marchó a córner tras la intervención de Juan Carlos y, justo después, fue Roberto quien no acertó con la testa tras un gran centro de Salinas. Pese a que el partido logró salir del estado de somnolencia en los últimos finales, ninguno de los dos equipos logró ver puerta y el empate a cero cerró un choque que se fue a los penaltis. En la pena máxima acabó ganando el partido el Girona.
Penaltis:
Kamara 0-1; Roberto 1-1; Miovski 1-2; Expósito 2-2; Kourouma 2-3; Pere Milla 3-3; Antal 3-4; Leo Salazar 4-4; Francés 4-5; Pablo Ramón 4-5.
@mongay_photography
Ficha Técnica
Espanyol: Ángel Fortuño, Carlos Romero, Cabrera, Calero, Omar El Hilali, Rubén Sánchez, Pol Lozano, Ramón Terrats, Antoniu Roca, Kike García, Javi Puado. También jugaron Miguel Rubio, Jofre, Pere Milla, Roberto, Edu Expósito.
Girona: Gazzaniga, Arnau, David López, Krejci, Papa, Yangel Herrera, Solís, Tsygankov, Asprilla, Stuani, Abel Ruiz. También jugaron Portu, Juan Carlos, Antal, Alejandro Francés, Lass, Jastin García, Miovski, Joel Roca, Kamara, Jordana.
Goles: -.
Tarjetas: Tarjeta roja a Cabrera (19’). A los visitantes Solís (32’) y Jastin (73’).
Árbitro: Gonzalo Romero.
Estadio: Nova Creu Alta.
