Este martes, en La Grada Ràdio, la tertulia ha estado de lo más completa, y no solo por nombres (que también): Raúl Alonso, Carlos Latorre, Ferran Granell y Àngel Bergadà se han sumado a Francesc Via para repasar el momento actual del Espanyol. Una hora larga de charla que ha mezclado análisis, inquietudes, certezas… y unas cuantas frases que vale la pena detenerse a comentar.
¿Más de 30.000 socios? Buenas señales…
La cosa ha empezado suave, con Via abriendo teléfonos para responder preguntas de suscriptores. Una de ellas, de las más repetidas últimamente: ¿se superará la barrera de los 30.000 socios esta temporada? La respuesta no ha sido directa, pero ha dejado entrever que el club pronto dará noticias… y serán buenas. Sin hacer spoilers, parece que las cifras van por buen camino y que el mensaje de reconstrucción empieza a calar.
¿Garagarza sigue? Sí, pero…
El tema más caliente del día ha sido, sin duda, el de Fran Garagarza. La reciente información de Futbol In! apuntando a su posible destitución y al supuesto interés en Michael Zorc (ex del Dortmund) ha hecho saltar las alarmas. Francesc Via ha querido ser muy claro: “No quiero desmentir las noticias de mis compañeros pero no me consta nada. Sé que Garagarza no será destituido inminentemente aunque entre la gente de Pace, acabará el mercado, y después veremos”.
Lo ha explicado con detalle, remarcando que “es cierto que se ha hablado con directores deportivos, pero no hay una decisión respecto a ejecutar esa decisión”. Según ha contado, Garagarza sabe que es un cargo de confianza y que podría haber cambios una vez cerrado el mercado, pero de momento “nada”. Ni sustos, ni urgencias.
Àngel Bergadà ha ido en la misma línea: “No es el momento ni tendría lógica hablar de una destitución de Garagarza cuando está haciendo su mejor mercado”, y es que, por ahora, no hay quejas con su trabajo. Todo lo contrario.
Pace, presente… pero todavía a medio gas
Otro asunto que ha generado debate es el papel actual de Alan Pace. Ferran Granell ha puesto sobre la mesa una inquietud compartida: “Me falta esa transición y toma de posesión de Alan Pace, porque creo que está afectando no a lo social y lo económico, pero sí en lo deportivo”.
Bergadà ha ido más allá con una reflexión muy sincera: “La falta de contacto directo con Alan Pace me tiene viviendo en un sinvivir de la ambigüedad. Me tranquilizó su tuit y verlo en Sabadell, pero este impasse me tiene inquieto”.
Via ha recordado que “Pace fue elocuente en su tuit, aún no puede entrar; él mismo pidió ponerse en cuarta fila en el palco de Sabadell”, y ha añadido un detalle interesante: “Tened en cuenta que Alan Pace será un mandatario que hará injerencias deportivas en el equipo. No es un Chen en este aspecto”, aunque ha reconocido que a Chen también le gustaba meter mano, como cuando vetó el fichaje de Manu Trigueros, algo en lo que pasado el tiempo parece que acertó.
El mercado aprieta, pero hay confianza
Carlos Latorre ha querido mandar un mensaje tranquilizador: “Estamos mucho mejor a estas alturas de otras temporadas. Tenemos una base, con el traspaso de Joan García y la ampliación de capital estamos mejor y en disposición de hacer cosas”. Eso sí, ha reconocido que el tiempo aprieta y que las incorporaciones han de llegar ya.
Ferran Granell lo ha resumido rápido: “Necesitamos tres fichajes de nivel, que vengan”, y Bergadà ha sido directo: “Estoy seguro que vendrán”. Optimismo, pero con los pies en el suelo.
¿Puerta Garagarza en Cornellà?
Entre bromas y verdades, uno de los oyentes ha soltado una frase que ha arrancado sonrisas en el estudio: “Garagarza será el primer director deportivo para el que habrá una petición para dar nombre a una de las puertas de Cornellà-El Prat”. No se sabe si llegará a tanto, pero es evidente que hay una parte del espanyolismo que valora muchísimo su trabajo.
Y Gragera… en la sombra
Para cerrar, ha salido un tema delicado: José Gragera. Se ha hablado del supuesto malestar interno por cómo se gestionó su recuperación la pasada temporada, cuando el equipo lo necesitaba, y también se ha recordado que Manolo González llegó a decir que no estaba a tono para jugar, y que algo parecido comentó también sobre Pablo Ramón. Es un asunto que no ha hecho mucho ruido pero que sigue ahí, latente.