El RCD Espanyol atraviesa unas semanas de transición marcadas por la incertidumbre. Con Rastar Group todavía al frente del club y VSL -el grupo de inversión liderado por Alan Pace– pendiente de completar la compra, muchos pericos se hacen la misma pregunta: ¿quién toma realmente las decisiones en el día a día del club?
En la calle, en redes sociales y en cada tertulia blanquiazul, el debate es recurrente. Cada fichaje, cada movimiento deportivo, genera dudas sobre si responden a órdenes directas de Rastar Group, si dependen exclusivamente del director deportivo Fran Garagarza o si ya hay influencia de Alan Pace y su equipo antes de que puedan asumir oficialmente el control.
La comparación con el Burnley
Uno de los comentarios más repetidos entre la afición apunta al Burnley, club de la Premier League propiedad también de Alan Pace y VSL. Allí, se percibe una fuerte inversión en fichajes, mientras que en el Espanyol los refuerzos parecen de perfil más bajo y ajustados al presupuesto. Sin embargo, hay que dejarlo claro: VSL aún no ha entrado en la gestión del club.
Los fichajes actuales son responsabilidad directa de Fran Garagarza y su equipo de trabajo. Hasta que no se complete la compraventa, ni Alan Pace ni sus colaboradores pueden inyectar dinero, traer patrocinadores ni influir en el límite salarial del Espanyol, que sigue siendo ajustado. Por esa misma razón, tampoco es cierto que VSL haya vetado operaciones como las de Urko o Kumbulla; simplemente, acometerlas en este momento supondría consumir prácticamente todo el margen disponible, dejando al club sin recursos para reforzar las demás posiciones que necesita cubrir.
Reuniones al más alto nivel
Eso no significa que Pace permanezca al margen. El futuro propietario ya ha mantenido reuniones tanto con Garagarza como con el entrenador Manolo González. Además, pidió a Alexander Rosen-ex director deportivo del Hoffenheim y actual asesor de VSL– que viajara a Alemania para conocer personalmente a Garagarza y a Manolo González y asistir a los partidos de la gira, con el objetivo de tener una visión más precisa de las necesidades del equipo. En esa misma línea, el propio Alan Pace quiso ver personalmente al Espanyol y se trasladó a Sabadell para presenciar la final de la Copa Catalunya contra el Girona, un gesto que fue interpretado como una muestra de implicación directa con el club. También estará presenciando el último partido de la pretemporada frente al Newcastle en St. James’ Park.
En todos estos contactos, Pace ha transmitido su disposición a colaborar y su intención de elevar el nivel de los fichajes cuando su grupo pueda tomar el control. De hecho, publicó recientemente un mensaje en redes sociales pidiendo paciencia a la afición perica y expresando su deseo de empezar a trabajar cuanto antes.
Una entrada más lenta de lo esperado
El desembarco de VSL se está dilatando más de lo previsto. Aunque el propio grupo esperaba tomar el mando antes, los trámites con el Consejo Superior de Deportes y LaLiga han ralentizado el proceso.
Este retraso preocupa a los futuros propietarios, que consideran clave poder explicar cuanto antes sus planes a la afición y detallar los ejes de su proyecto deportivo, financiero y de marketing para el Espanyol.
Por ahora, la realidad es clara: Fran Garagarza sigue al mando y trabaja con los recursos disponibles para cerrar los cuatro fichajes prioritarios que necesita el equipo. Una vez VSL tome las riendas, la historia podrá cambiar, pero hoy, el Espanyol sigue bajo la administración de Rastar Group.


