El Espanyol todavía saborea la remontada frente al Atlético y, entre los protagonistas, uno destaca por su instinto de aparecer cuando más falta hace: Pere Milla. El delantero ilerdense volvió a reivindicarse con un gol de esos que cambian partidos, de esos que explican por qué, aunque no siempre sea titular, rara vez deja de ser importante.
Entró en el minuto 74 y, apenas 16 minutos después, ya había firmado de cabeza el tanto que desató la locura en el RCDE Stadium. Lo suyo no es casualidad: la lista de momentos decisivos en los que ha aparecido con la camiseta blanquiazul es larga. Desde el tanto que selló la permanencia contra Las Palmas, pasando por la asistencia a Puado en la final del playoff frente al Oviedo, hasta este gol que sirve para arrancar la Liga con victoria de prestigio. Lo de Milla es puro oportunismo, pero del bueno.
Tras el partido, habló para los medios oficiales del club y se mostró como siempre: sencillo, directo y con los pies en el suelo. “Muy bien, muy contento por el gol, sobre todo por la victoria, son tres puntitos muy importantes ante un gran equipo y ante nuestra afición”, decía con una sonrisa que no escondía la satisfacción.
Hacía tiempo que no marcaba y se notaba que lo necesitaba: “Muy contento, llevaba tiempo sin hacer gol, contento por los goles y por poder ayudar al equipo, al final siempre lo he dicho, aquí lo más importante es el Espanyol”. Un discurso que lo retrata: lo suyo es remar en silencio y aparecer cuando más duele al rival.
El delantero también quiso subrayar la importancia del trabajo colectivo: “Por suerte llevamos mucho tiempo trabajando la mayor parte de los jugadores y hace que te conozcas más sobre el campo, el equipo ha dado un paso adelante, pero vayamos poco a poco, acabamos de comenzar la Liga”. Eso sí, admitió que estrenar la temporada con victoria refuerza la confianza: “Sí es importante ganar el primer partido de Liga, muy contento, y ahora a por la Real Sociedad”.
Sobre el duelo en Anoeta, Milla no se anduvo con rodeos: “Un partido muy difícil, muy complicado de la categoría, nos pondrán las cosas muy difícil pero iremos a ganar. El míster dice que nos hemos de acostumbrar a ganar, lo hemos hecho en pretemporada y en el primer partido de Liga, así que el segundo iremos también a ganar”.
No es casualidad que Manolo González insista en que no quiere “actores principales y secundarios”. Lo de Pere Milla demuestra que todos cuentan. Es el hombre de los goles importantes, el que siempre aparece cuando el guion lo pide. Y esa es una virtud que el Espanyol, en un año de supervivencia y ambición, no puede permitirse desaprovechar.