El Barça lo ha vuelto a hacer. La relación entre las canteras de Espanyol y el club culé vuelve a estar marcada por el trasvase de talento en dirección al lado azulgrana de la ciudad. Esta vez el nombre propio es Uri Pallàs, centrocampista nacido en 2007 que, tras once años defendiendo la camiseta blanquiazul, cambia de acera para fichar por el Juvenil A del FCB
El movimiento no pilla del todo por sorpresa, aunque duele en clave perica. Pallàs, uno de los capitanes del Espanyol en categorías inferiores, era un mediocentro con buena reputación dentro de La21, valorado por su capacidad de ordenar al equipo y su lectura del juego. La operación llevaba semanas cocinándose y se cerró oficialmente hoy, cuando el jugador acudió a la Ciutat Esportiva Joan Gamper acompañado por su familia y por su agente, Carles Gastón (SEG).
De hecho, las señales ya estaban ahí. La semana pasada el chico se despidió de sus compañeros del Espanyol y ayer incluso se dejó ver con la camiseta blaugrana, disputando un amistoso con el Juvenil A en Vic. Blanco y en botella. El fichaje estaba al caer.
Este caso se suma a una lista que empieza a ser demasiado larga para el gusto perico. El Barça ya había pescado recientemente en el vivero blanquiazul con Pol Mancheño y con los hermanos Minguk y Daehan Lee, todos procedentes de la Dani Jarque.
