El empate en Montilivi ante el Girona dejó a mucos pericos con sensación de decepción, pero en las cuentas de la inteligencia artificial ha salido bien parado el Espanyol. Según la nueva predicción de Opta, una vez acabada la Jornada 7, los blanquiazules suben del noveno al séptimo puesto proyectado, con 50,68 puntos esperados al final de curso. O sea, la máquina dice que los de Manolo González van a estar por encima de la media de la liga.
Europa se mantiene en el horizonte
Los porcentajes siguen siendo modestos, pero invitan a soñar: la IA le da al Espanyol un 5,77% de opciones de Champions, un 6,79% de Europa League y un 7,95% de Conference. Nada de locuras, pero si hace un mes nos cuentan que estaríamos hablando de esto, más de uno habría firmado con los ojos cerrados. Europa es más un deseo que un objetivo en estos momentos, pero está en la foto.
Adiós al miedo al descenso
La comparación con la Jornada 6 es clara. Si entonces Opta le daba al Espanyol un 5,43% de riesgo de bajar, ahora la cifra es del 5,36%. La diferencia es mínima, pero confirma tendencia: el fantasma del descenso está cada vez más lejos. Mientras tanto, otros como Girona (66%), Oviedo (39%) o Levante (33%) siguen atrapados en la zona roja de la proyección.
De noveno a séptimo en solo una jornada
El gran salto está en la tabla proyectada. El Espanyol pasa de verse noveno a aparecer séptimo, adelantando a Elche y Valencia en las cuentas del superordenador. Puede sonar a detalle, pero es la manera en que la IA refleja que el equipo está compitiendo y que esos empates, aunque saben a poco, no están devaluando su temporada.
Barça y Madrid, liga aparte
Arriba, la foto no cambia demasiado: el Barcelona es favorito con un 62,55% de opciones de ser campeón, mientras el Real Madrid se queda en un 31,65%. Atlético y Villarreal completan el cuarteto de cabeza, aunque muy lejos en probabilidades reales de pelear el título. La Liga parece cosa de dos, como casi siempre.
El Espanyol en la “otra liga”
La pelea de verdad está en la zona media-alta, donde se mezclan Athletic, Betis, Elche, Valencia, Osasuna… y el Espanyol. Aquí es donde el equipo de Manolo González tiene que dar la cara cada fin de semana, con la tranquilidad de no mirar abajo y con la ilusión de estar en la pomada por Europa. No hay presión, pero sí ilusión.