Edu Expósito está viviendo un momento dulce. Después de pasar once meses fuera por una grave lesión de rodilla, el centrocampista de Cubelles se ha convertido en uno de los líderes silenciosos del vestuario. En una entrevista con Mundo Deportivo, habló sobre su proceso, el estado del equipo y su deseo de seguir dejando huella en el Espanyol. “Yo lo he dicho siempre, vine aquí para ser importante y lo que quiero es ser importante”, dejó claro.
Un Espanyol en plena forma
El equipo de Manolo González ha empezado el curso con fuerza, y Edu lo sabe: “No nos esperábamos estar ahí a estas alturas, pero la verdad es que el equipo ha empezado con mucha fuerza esta primera vuelta, así que muy contentos”, reconoció. El Espanyol suma 15 puntos, ocupa la sexta posición y ha ganado su primer partido fuera de casa, algo que en el vestuario ha supuesto un chute de confianza.

A la hora de resumir el momento blanquiazul en una sola palabra, Edu lo tiene clarísimo: “Compromiso. Todos estamos aportando nuestro granito de arena, los que salen de inicio y los que vienen de banquillo también. El míster ha ido haciendo rotaciones de vez en cuando, así que yo creo que el compromiso de todos hace que estemos a este nivel ahora mismo”.
Objetivo claro: la permanencia y después soñar
Sin dejarse llevar por la euforia, el jugador mantiene los pies en el suelo al hablar de objetivos: “Bueno, lo que hemos dicho siempre: permanencia primero. Intentar llegar a esos puntos lo antes posible y, a partir de ahí, soñaremos y seremos exigentes para poder llegar lo más arriba posible”. Aun así, reconoce que el equipo tiene margen de mejora y nombres que todavía pueden dar más: “Habla mucho de lo que es el equipo: jugadores con talento que venían, a priori, a ser importantes, al final les está costando un poco más, pero les necesitamos, porque LaLiga es muy larga”.

La paciencia como clave de su renacimiento
El catalán explicó qué ha sido lo más importante para alcanzar su actual nivel: la paciencia. “Fueron 11 meses y pico desde un partido a otro, fue muy largo. Pero también, sobre todo, la paciencia que tuve para no entrar. Porque realmente el míster consideró que no estaba preparado, y es verdad. El estar 11 meses fuera me permitió ver que todavía no estaba preparado, que igual me hubiera podido entrar un poco de ansiedad a la hora de querer jugar ya. Y no, hasta que no estés bien, hasta que no tengas el ritmo, no te precipites. Eso me está llevando a sacar el nivel ahora”.
“Lo que quiero es marcar en casa”
Aunque está brillando en el centro del campo, Edu admite que tiene una espinita clavada: el gol. “Con ganas de hacerlo, y sobre todo en casa, que en casa en Primera división no he metido. Sí metí contra el Zaragoza, en Segunda, pero tengo ganas. A ver si este fin de semana puedo dar una alegría a la afición”.
El cambio de posición también tiene algo que ver: “Sí, yo creo que Manolo siempre me ha visto más en la base, pero por circunstancias, cuando entré, acabé entrando de mediapunta, pero a él siempre le he gustado un poco más en la base. Él me ha dicho siempre que al final es donde vea y considere que es lo mejor para el equipo”.
Compañeros y química en el campo
Edu no duda en elogiar a su socio en la medular: “Pol Lozano tiene una capacidad muy buena con pelota, pero también corrige muy bien, está muy concentrado durante el partido. Y, sobre todo, que es un jugador muy pesado para el rival. Me he enfrentado con él varias veces y es bastante pesado”, bromeó.

También tuvo palabras para los nuevos y los que regresan. De Rubén Sánchez, dijo: “Le ha venido muy bien, como le digo yo, el Erasmus que ha hecho dos veces. Primero a Miranda y luego a Granada. Le ha venido muy bien para llegar ahora, que desde pretemporada está a un nivel muy alto”. Y sobre Riedel, el central alemán: “Es un chico joven, con muchísima fuerza, muy pasional. Se está adaptando muy rápido al equipo y al grupo. Intenta integrarse también con el idioma, y así es mucho más fácil para todos”.
La dirección deportiva, en buena línea
Expósito también quiso destacar el trabajo del club en los despachos. “Sí, es un acierto. Al final el resultado es el que te va a decir si está bien o no. El año pasado se consiguió la permanencia, aunque fuera en el último partido, pero las cosas se están haciendo bien, asentando unas bases que eso es clave”, explicó sobre la labor de Fran Garagarza y su equipo.
Renovación en pausa, pero con las ideas claras
A nivel personal, Edu acaba contrato en 2027, pero todavía no ha habido movimientos para prolongarlo. “No, de momento no ha habido ningún acercamiento”, reconoció. Aun así, dejó clara su voluntad de futuro: “Yo lo he dicho siempre, vine aquí para ser importante y lo que quiero es ser importante en el Espanyol”.
Orgullo de pertenencia y 125 años de historia
Con el 125 aniversario del club a la vuelta de la esquina, el jugador de Cubelles se muestra orgulloso de vestir la blanquiazul: “Es impresionante todo lo que hay detrás. Me encanta cuando estoy por el barrio y se acercan muchos pericos a saludarte. Sobre todo, me pasó cuando estaba lesionado. Se me acercaban cuando iba con las muletas y eso al final te ayuda, te motiva. Muy contento”.

Y cuando le preguntaron sobre el eterno debate de quién es el segundo equipo de Catalunya, fue tajante: “Creo que no hay debate que hablar mucho. 125 años de historia, con esto te lo digo todo”.
Edu Expósito ha pasado de sufrir una de las lesiones más duras de su carrera a convertirse en uno de los pilares del nuevo Espanyol de Manolo González. Madurez, humildad y compromiso resumen a un jugador que ha aprendido a esperar su momento… y que ahora está brillando justo donde quería: en casa.
