La Tertulia de este martes en La Grada Ràdio vino fuerte. Con Luis Leirós, Àngel Bergadà y Ferran Granell como invitados bajo la batuta de Francesc Via, la tertulia fue un reflejo perfecto de lo que se respira en el entorno del Espanyol esta semana: críticas al planteamiento de Manolo González en Mendizorroza, dudas con algunos jugadores, y un análisis sereno del porqué se perdió ante el Alavés.
Bergadà fue directo: “:Se perdió un partido que esperaba ganar, pero viendo la primera media hora se ha de reconocer el Alavés nos pasó por encima y no supimos reaccionar, se planteó el partido de inicio tal vez de una manera no correcta, pese a ello se pudo empatar, no hubiese sorprendido a nadie pero tampoco se puede decir que la derrota sea injusta”. Aun así, quiso rebajar la tensión que se ha generado con Manolo: “11 jornadas, 18 puntos, y muy sorprendido por tanta crítica feroz a Manolo estando como está el equipo”.
Ferran Granell añadió que “no toda la culpa es de Manolo, no tiene la culpa de lo de Rubén”, y Leirós lo resumió con su estilo habitual: “A mí la alineación me sorprendió; Manolo es un hombre que nos tiene acostumbrados a digámosle frivolidades futbolísticas, le gusta hacer cambios, y una de las bases de este Espanyol es la psicología que usa el entrenador con sus jugadores. Psicológicamente los tiene en tensión constante, pero eso no se puede mantener desde el partido 1 al 38, hay altas y bajas, físicamente estamos muy altos. Dentro de esa psicología debió pensar que dos jugadores que no venían habiéndolo habitualmente debían jugar. Hubo dos cambios, y un cambio de planteamiento, que ahí está la cuestión; el entrenador contrario fue más inteligente, retrasó a Denis y ellos comenzaron a triangular ante nuestro cuadrado que es estático, y no supimos que hacer. Van y nos meten el primer gol, si le unes errores individuales te vas 2-0 al descanso. Yo hubiera cambiado medio equipo al descanso”.

La alineación sorpresa de Manolo y su efecto en el partido
La alineación inicial contra el Alavés, con Kike García y Antoniu Roca de inicio, fue uno de los puntos calientes del debate. Bergadà dijo que “yo también califiqué de sorprendente la alineación, ver a Antoniu y poner a Kike García cuando jugó 60 minutos en Copa. Al margen de esto quiero hablar de donde estamos, de que planteas un partido pero el técnico rival también, Coudet sabe como contrarrestar al Espanyol. Pudimos empatar, perdimos, y eso forma parte del deporte, eso siempre pasa. Ya veníamos avisando, ¿qué pasará cuando perdamos un partido ante un rival ganable, o cuando perdamos tres partidos, ¿qué pasará, lo quemaremos todo? Esto es futbol y lo que paso en Mendizorroza es que la primera media el Alavés fue muy superior a nosotros, cuando pasa, felicidades y punto, a pensar en el siguiente partido. Ahora parece que todo son inventos, pues no, Coudet acertó más y ya está”.
Por su parte, Ferran apuntó que “tal vez Antoniu y Jofre no son los adecuados para hacer la presión que hace el equipo normalmente”.
Via rebatía la mayor: “Todo lo reducís a los cambios, ¿y los otros jugadores que se han demostrado fiables toda la temporada como Romeo, Riedel, Pol, qué 25 primeros minutos hicieron? Lo reducimos todos a los dos cambios en el once, que no funcionaron porque Manolo los cambió al descanso. ¿Qué fueron tarde los cambios? ¿Cuándo cambios hay en el minuto 30 de los partidos?”
Ferran consideraba ante esta reflexión que se tardó demasiado en poner solución al roto: “Si no te funciona desde el minuto uno, haz cambios. Cuando fueron, ya era tarde”
“Qué tiene que ver hacer dos cambios en la alineación con los errores individuales? Hay cosas que salieron mal que son del entrenador, sí porque el mismo hizo cambios en el 45’ y es porque ve que se equivocó, peo es que hubo más cosas”, insistía un Via al que contestaba Luis Leirós: “Yo no hablo del entrenador porque me lo he propuesto, yo soy espanyolista y es el entrenador que tenemos. ¿Es el que me gusta? No. Pero es el que tenemos y ya no hablo de él. Es el mascarón de proa del nuevo espanyolismo, pues vale, no voy a discutir a Manolo. Estamos ganando y es lo que me importa. Pero tenemos un sistema de juego y cuando nos salimos de eso la liamos. Y después la plantilla, resulta que si perdemos no sirve pero a la vez decimos que Garagarza es el mejor director deportivo del mundo. Ya me confundo con todo. El otro día, pues fue un mal partido, los jugadores no salieron con la concentración debida, el sistema no fue el adecuado, en la segunda parte reaccionamos pero a partir del minuto 10…”
Via no compraba su argumento: “No es cierto, reaccionamos en la primera parte, hubo ocasiones para empatar pero la cagamos son se segundo gol. Tuvimos muchas ocasiones”
Ferran intentaba pasar página con esta reflexión: “Un mal día y a pensar en el Villarreal. Ahora, tal vez Antoniu y Jofre no son los adecuados para hacer la presión que hace el equipo normalmente”

Romero y Terrats, protagonistas por las cláusulas del miedo
Otro de los grandes temas del día fue el famoso dilema de las cláusulas del miedo que impone el Villarreal a sus cedidos. Romero y Terrats no podrían jugar este sábado salvo que el Espanyol pague una cifra alta, muy superior a la de años anteriores, según adelantó Quique Iglesias.
Leirós lo dijo sin rodeos: “Por la salud mental de todos los socios, los puntos se quedan en casa. Si hay que pagar, que se pague, por los dos. Romero es nuestro jugador más importante, para mí es imprescindible”. Bergadà fue más conservador: “Yo pagaría solo por Romero, pero sería un agravio comparativo y acabar de hundir a Terrats”. Y Ferran apostó por la vía señorío: “Somos un club señor y se ha de pagar, se ha de ganar. Quizá Terrats no está aportando lo que nos gustaría, pero se ha de pagar”.
¿Romero imprescindible y Terrats prescindible?
El tema tiene miga, porque Romero se ha ganado su sitio y es pieza clave, mientras que Terrats no ha tenido continuidad y apenas suma minutos. Por eso, el dilema está sobre la mesa de Garagarza y Manolo González, que se reunirán esta semana para decidir qué hacer.
Lo que está claro es que la decisión que se tome marcará no solo la alineación contra el Villarreal, sino también la percepción del grupo. Pagar por uno sí y por otro no puede ser un mensaje difícil de digerir en el vestuario.