Han pasado unos meses desde que Joan García decidió dar uno de los pasos más polémicos de su carrera: dejar el Espanyol para fichar por el Barça. Desde entonces, mucho se ha hablado, mucho se ha especulado y de ahora de nuevo se ha escuchado al propio protagonista. Ha sido en los micrófonos de RAC1, donde explica cómo vivió su salida, su particular y discutible visión del cariño a los colores blanquiazules y cómo se prepara para su regreso a Cornellà-El Prat el próximo 3 de enero, ahora vestido de azulgrana.
El beso al escudo… y la decisión más dura para el espanyolismo
Joan fue claro y directo, sin esconderse ni tirar balones fuera. “Todo lo que he hecho, el beso al escudo, lo he hecho porque en ese momento lo sentía”, soltó sin dudar. No esquivó el recuerdo de sus años como perico: “He pasado muchos años allá en el Espanyol, he sufrido mucho, también he disfrutado mucho, sobre todo el último año fue complicado, hasta el último día no pudimos salvarnos y son cosas que te salen”.
“Una cosa no quita la otra”, insistió, defendiendo que “el cariño que le tengo puede ser compatible con dar un paso adelante y buscar lo mejor para mi carrera”.
#TuDiràs | 🔵🔴 𝗝𝗢𝗔𝗡 𝗚𝗔𝗥𝗖𝗜𝗔, sobre el retorn a Cornellà-El Prat el 3 de gener:
🗣️ “Tinc ganes de tornar. Sóc conscient del que pot passar, però hi aniré tranquil com a qualsevol altre estadi”
💥 A partir de les 22:30h, a @rac1, l’entrevista completa amb @aleixparise pic.twitter.com/gF1lCSFfHb
— Esports RAC1 (@EsportsRAC1) November 11, 2025
Regreso marcado en rojo
El calendario no perdona, y el destino ha querido que Joan vuelva pronto a casa. El 3 de enero está señalado como el primer derbi de 2026 y será en Cornellà-El Prat, con todo lo que eso implica. Joan lo sabe. “Bien, con ganas; ¿si haré el partido perfecto? Ojalá, eso intentaremos”, comentó con una sonrisa. Pero rápidamente se puso serio: “La verdad, tengo ganas de volver. Creo que será diferente volver con otra camiseta, consciente también de qué puede pasar, pero iré como a cualquier partido: hacer el mejor partido posible e intentar ganar”.
El recibimiento, toda una incógnita… o no
No lo dijo directamente, pero se nota que es consciente de que su nombre no será aplaudido precisamente cuando salte al campo. Lo que un día fue amor, ahora tiene forma de decepción para buena parte de la grada. Aún así, Joan no se muestra arrepentido y asume las consecuencias. Cree en sus decisiones, pero no reniega del todo del club que le vio crecer.
El tiempo dirá si la herida se cierra. Pero de momento, la cita ya está ahí, a la vuelta de la esquina. Joan volverá a pisar el RCDE Stadium, esta vez con otra camiseta, pero con la misma idea en la cabeza: hacerlo lo mejor posible… aunque esta vez no sea para alegría de los suyos.
