El encuentro del lunes ante el Sevilla no es uno más. En La Grada Ràdio llevamos toda la semana avisando de que el calendario del Espanyol antes de acabar el año es de esos que te dejan sin uñas: Sevilla, Celta, Rayo, Getafe y Athletic. Cinco partidos seguidos que pueden marcar si el equipo llega a 2026 mirando hacia arriba… o mirando el retrovisor. Por eso este Sevilla – Espanyol está subrayado en rojo: perder complicaría las cosas, pero ganar podría dejar al equipo muy bien colocado para lo que viene. Y este lunes, ante el Sevilla, toca jugar justo en el filo de esa navaja.

El equipo llega a la cita después de las dos derrotas ante Alavés y Villarreal. La de Vitoria tuvo aquella media hora nefasta que ya todos hemos comentado mil veces; la del Villarreal estivo marcada por la superioridad del rival en calidad, pero sin punto no hay consuelo. Aun así, el buen colchón del inicio de curso mantiene al Espanyol en una privilegiada sexta posición, un lujo para un equipo que no hace tanto luchaba para subir a Primera y que trabaja con un presupuesto bastante más modesto que otros. Pero, claro, ni eso evita que el run-run aparezca siempre que se juntan dos tropiezos y se acerca un partido marcado en rojo.
El Sevilla llega con necesidad y con la calculadora en la mano
El rival del lunes no viene precisamente a hacer turismo. El Sevilla, tras un inicio de curso muy irregular, es ahora mismo noveno con 16 puntos, solo dos menos que el Espanyol. Si gana en el RCDE Stadium, hará el famoso sorpasso, y eso sí que podría desatar cierta tormenta en un sector muy concreto de la afición. Ya sabemos cómo funciona esto: Manolo González ha superado todos los objetivos desde que llegó, uno detrás de otro, pero vive en examen permanente por parte de un sector de la grada y algunos medios. Es casi una tradición.

Por eso, ganar este lunes no solo serviría para frenar esas dudas, sino para enviar un mensaje claro: este equipo quiere quedarse arriba, y no está ahí por accidente.
Los rivales pueden abrir la puerta a un salto grande
La jornada, además, ofrece un pequeño regalo en forma de enfrentamientos exigente que afectan a los alrededores de la zona noble. Si el Espanyol hace los deberes, puede salir reforzadísimo.
El Betis, quinto dos puntos más que los pericos, recibe a un Girona que está tercero por la cola con 10 puntos y necesita sumar de tres ya para salir del pozo. A priori, partido complicado para ambos, pero sobre todo un duelo que puede dejar al Betis frenado.

Detrás del Espanyol están el Athletic y el Getafe, ambos con 17 puntos. El Athletic visita hoy un Spotify Camp Nou en obras para medirse al Barça, que está obligado a ganar para mantener el pulso con el Madrid. Y el Getafe recibe a un Atlético de Madrid que llegó al parón lanzado y con cara de equipo serio. Ninguno lo tiene fácil.
Y si miramos por debajo del Sevilla, también hay un grupo que puede dejar puntos. El Alavés, con 15, abre la jornada del sábado ante el Celta, que necesita un respiro urgente. El Elche, también con 15, se enfrenta al Madrid en el Martínez Valero, con todo lo que ello supone. Y el Rayo, otro con 15, va al campo del Oviedo, donde todo se vive ya con dramatismo permanente y aroma de final a vida o muerte.
Si todo se mueve como pinta, ganar al Sevilla sería casi como subir dos escalones de golpe.
El calendario aprieta y este partido es la primera piedra
En La Grada hemos repasado toda la semana el calendario de aquí a final de año, y no es precisamente blando. El Espanyol tendrá que afrontar:
-
Lunes 24 nov (21:00 h): Espanyol – Sevilla
-
Domingo 30 nov (18:30 h): Celta – Espanyol
-
Domingo 7 dic (18:30 h): Espanyol – Rayo
-
Sábado 13 dic (18:30 h): Getafe – Espanyol
-
Lunes 22 dic (21:00 h): Athletic – Espanyol
Es un mes para sumar lo máximo posible, sobre todo porque después llega Navidad y ya sabemos que lo que pasa en diciembre marca la temperatura emocional de toda la afición.
Por eso este lunes no es un partido más. Es el primero de un tramo durísimo y, al mismo tiempo, una oportunidad gigante de demostrar que lo de estar sextos no es una anécdota. Que este equipo quiere quedarse donde está.
El Espanyol está en una posición bonita… pero frágil
La sensación general es que el Espanyol ha hecho muchas cosas bien y, aun así, no tiene margen para despistarse. Las dos derrotas no han borrado nada, pero sí han recordado que LaLiga te castiga en cuanto aflojas.

El partido del lunes puede ser ese punto de inflexión que cambia la dinámica o el que enciende el run-run otra vez. Depende de 90 minutos y de aprovechar el momento. Después del Sevilla vienen cuatro partidos contra equipos que están peleando lo mismo que el Espanyol o incluso viven situaciones más urgentes. Por eso, arrancar este mini-maratón con una victoria sería un golpe de efecto tremendo. Este lunes, más que tres puntos, el conjunto perioco se juega la tranquilidad. Esa que siempre dura poco en casa perica, pero que cuando aparece… se agradece.
