Para gran cantidad de los trabajadores, las jornadas laborales no culminan al marchar de la oficina. Llamadas no solicitadas o correos electrónicos urgentes suelen interrumpir los ratos de tiempo libre. Una nueva ley laboral ha entrado en vigor a partir de 2025 y promete cambiar drásticamente la relación que existe entre trabajadores y sus empresas.
Esta modificación normativa realiza la garantía del derecho a la desconexión digital, una medida esperado por muchos y que responde a una necesidad que va en aumento en el entorno laboral contemporáneo. En esta dirección, si bien han existido intentos anteriores de regular esta situación, la estadística más reciente señala que un porcentaje a partir del 60% de trabajadores y trabajadoras permanece conectado justamente en contra de su horario.
Dicho fenómeno afecta tanto a los trabajadores que teletrabajan como a los trabajadores de sectores como el de la educación o el de la sanidad, evidenciando la urgencia de medidas efectivas.
El derecho a la desconexión digital
La desconexión digital, que queda reforzado después de la entrada en vigor de la nueva normativa, ya estaba contemplada en el Estatuto de los Trabajadores y en la Ley de Protección de Datos. De esta forma, con este proceso de reforma de implementación de la figuración de la ley se expone con mayor claridad la garantía que responde a la porción de trabajadores de no poder ser localizados fuera del tiempo de jornada laboral.
Esto quiere decir que las empresas no podrán llegar a localizar a sus trabajadores fuera del tiempo de la jornada, salvo en situaciones excepcionales. La situación de la conexión ininterrumpida todavía se ha incrementado con el crecimiento del teletrabajo. Se señala que al realizar encuestas resulta que un 39% de las personas trabajadoras remotas manifiestan dificultades por lo que concierne a la desconexión asociada al uso combinado de dispositivos personales y laborales.
La nueva realidad normativa asume, de nuevo, la ley y permite establecer los mecanismos a efectos de asegurarse que los trabajadores puedan hacerlo en lo que concierne a separar su vida personal de su vida laboral.
Fecha para la ley de desconexión
Aunque la medida ya tiene el visto bueno, aún no hay una fecha exacta, lo que sí se sabe es que el Gobierno tiene hasta el 31 de diciembre de este año 2025 para publicarla de forma oficial en el BOE y todo ello dependerá de si los partidos políticos llegan a acordar un consenso en la aprobación definitiva.
Este podría ser un problema debido a la intranquilidad de las personas trabajadoras que esperan que las y los legisladores hagan suya esta normativa, aunque hay unas expectativas altas debido al respaldo manifiesto de las personas expertas en derecho laboral que mantienen (también) con el apoyo de las organizaciones de personas trabajadoras.
Multas y medidas para garantizar el cumplimiento de la norma
El nuevo estatuto no solo es conveniente para ellas, sino que también tiene medios para su respeto: la no existencia de este puede suponer que las empresas se la jueguen con multas y sanciones de un importe que puede llegar hasta 7.500 euros. Con la aprobación de la nueva ley se alienta el respeto de la norma en cuestión y ayuda crear una cultura empresarial cada vez más consciente de las necesidades de las personas trabajadoras y el respeto a sus derechos dentro de la empresa.
Con todo ello podemos afirmar que esta ley supone una mejora de los derechos laborales de las personas trabajadoras, puesto que su finalidad no es otra que favorecer el bienestar de las personas trabajadoras y equilibrar de esta forma, los esfuerzos y exigencias del contexto de trabajo con el bienestar.