La pensión de jubilación es algo que muchas personas esperan. Con el retraso de la edad de jubilación, en 2025 se deben tener cotizados 38 años y tres meses a la Seguridad Social para acceder al 100% de la pensión de jubilación y jubilarse con 65 años. La edad de jubilación cuando no se cumplan estos requisitos, será de 66 años y 8 meses. Esto hace que haya personas que estén haciendo cálculos para ver cómo quedará el tema de su pensión de jubilación. Un asunto que para nada es ligero, ya que en muchos casos hay quienes no cuentan con otras fuentes de ingresos para sostenerse.
Los años que se necesitan cotizar para cobrar la pensión
A la pregunta de si para cobrar una pensión de jubilación contributiva hay que cotizar 38 años y tres meses, la respuesta es que no. Ese es el tiempo que se necesita cotizar para cobrar la cuantía completa. Sin embargo, si se han cotizado un número mínimo de años, se irá percibiendo la cuantía según la cotización acumulada.
En este caso, es importante saber que para cobrar la pensión de jubilación contributiva se debe haber cotizado al menos durante 15 años. Eso sí, en este caso solamente se percibirá el 50% de la cuantía que corresponde por la pensión de jubilación. Eso quiere decir que, a más años cotizados más se percibirá el día de mañana. A esto se suma el hecho de que hay otras vías para cobrar una pensión de jubilación aunque ni tan siquiera se hayan cotizado esos 15 años a la Seguridad Social durante la vida laboral.
Opciones si no se tienen
Las opciones que se tienen para cobrar una pensión de jubilación si no se han cotizado al menos 15 años a la Seguridad Social son dos. La primera vía y la más interesante y recomendada si faltara poco tiempo de cotización para alcanzar el objetivo es la de los convenios especiales. Estos son convenios mediante los que se puede aumentar el tiempo de cotización haciendo aportaciones económicas.
Por otro lado, cuando esto no es así o esa opción no es posible, se puede acceder a una pensión de jubilación no contributiva. En este caso hay que tener en cuenta que funcionan como una especie de prestaciones. Es decir, son gestionadas por el IMSERSO y no por la Seguridad Social directamente, al no provenir de cotizaciones y aportaciones de quienes las cobran. La cuantía ronda los 500 euros mensuales y es la más baja del sistema de pensiones. Hay que cumplir con unos requisitos para mantenerla, además de para poder percibir.
En cuanto a la pensión de jubilación contributiva, por mucho que pueda pensarse que se trata de una prestación vitalicia, lo cierto es que también es necesario mantenerla en el tiempo y se puede perder. Pero lo más importante, no siempre puede conseguirse con 15 años cotizados.
Pensión de jubilación con 15 años cotizados no concedida
Aunque hemos dicho que el requisito para cobrar la pensión de jubilación es tener al menos 15 años cotizados a la Seguridad Social, el organismo detalla en la letra pequeña de este punto, un factor adicional.
Se trata de un punto recogido en la Ley 8/2015 General de la Seguridad Social por el que se puede rechazar el acceso a la pensión de jubilación contributiva en ese caso. Y es que «dos de esos años deben estar incluidos dentro de los 15 años anteriores a la solicitud«. Por eso, no es motivo de seguridad contar con esos 15 años cotizados. Sin embargo, este problema puede solucionarse con los convenios especiales antes citados en muchos casos y aportando las cuotas correspondientes en cada caso.