No hay ninguna duda de que el móvil es una herramienta imprescindible en nuestro día a día, hasta el punto en el que se ha convertido en prácticamente un apéndice de nuestro cuerpo. Lo utilizamos a todas horas y vamos con él a todas partes. No obstante, no es oro todo lo que reluce y hay que ser consciente de la responsabilidad que tenemos al hacer uso del dispositivo.
Una mala praxis con él o simplemente un descuido puede suponer un grave perjuicio a tu seguridad y privacidad. Los hackers y ciberdelincuentes están atentos a la más mínima oportunidad para robar tus datos o introducir un virus en el terminal. Por eso, los expertos aconsejan desconectar un ajuste oculto en tu móvil antes de salir de casa, ahorrándote así problemas y batería.
Un detalle al que no le damos importancia
¿Cuántas veces has salido de casa y has desactivado inmediatamente el wifi de tu móvil? Crees que es un gesto sin importancia y por lo tanto no te detienes a pensar en que puede ocasionarte serios problemas. Cuando mantienes el wifi activado, tu teléfono móvil inicia un proceso continuo y activo de búsqueda. El dispositivo continúa emitiendo señales y no para hasta conseguir una red wifi a la que conectarse.
Esto, que en un entorno seguro y controlado, debería ser una ayuda para lograr conectividad, en un espacio público y masificado puede convertirse en una amenaza. De esta forma dejas tu teléfono expuesto a que cualquier delincuente con malas intenciones, mediante unos conocimientos básicos haga y deshaga a su antojo.
La táctica del hacker para que caigas en la trampa
El hacker utiliza una técnica sencilla pero astuta llamada «ataque del gemelo malvado» (Evil Twin en inglés). El ciberdelincuente crea un punto de acceso wifi con su propio ordenador o dispositivo y le asigna un nombre común y atractivo, por ejemplo: «WIFI_GRATIS_CentroComercial». Incluso puede ponerle el nombre de una red a la que tu móvil ya se ha conectado anteriormente. En ese momento, tu smartphone ya ha caído en la trampa.
Tu móvil detecta esa red que le resulta familiar y sin necesidad de una contraseña, se conecta automáticamente a ella pensando que es fiable. Al no pedirte permiso, ya el hacker ha accedido a la información de tu teléfono pudiendo ver, copiar o modificar los mensajes y datos que envías o recibes.
Los ladrones están al alcance de todo
Aunque puedas pensar que simplemente con no meterte a la aplicación del móvil ya habrás resguardado el mayor peligro, lo cierto es que los ciberdelincuentes pueden igualmente hacerse con las contraseñas del correo electrónico, las redes sociales o las plataformas de compra online. Y también pueden sustraerte fotos personales y conversaciones de WhatsApp. Tu intimidad puede ser vulnerada.
El mayor problema llega cuando utilizas la misma clave para varios sitios webs o aplicaciones. Una vez que descubran cual es podrán acceder a tu correo, a tu cuenta de Netflix, a la intranet de tu trabajo… un auténtica pesadilla. Por lo tanto, dejar el wifi de tu móvil activado sin control es como darle a un desconocido acceso potencial a tu identidad digital completa, pudiendo llegar en el peor de los casos al chantaje o la suplantación de identidad.
Solo hay una solución a este problema de seguridad digital y es muy sencillo: cambiar tu hábito y acostumbrarte a desactivar el wifi al salir de casa. Simplemente bastará con entrar en el menú de acceso rápido de tu móvil y desactivar el icono del wifi. Así podrás estar tranquilo en cualquier lugar público sin tener la sensación de que tu teléfono está expuesto a cualquier peligro o amenaza.
