Uber ya está sobre aviso de la nueva ley del taxi en Barcelona que amenaza con modificar drásticamente la movilidad en la ciudad. La nueva normativa del Gobierno de Cataluña busca restringir la actividad de los VTC, sin embargo, la empresa estadounidense le ha dado la vuelta a la situación y ha encontrado la manera de sacar rédito de esta futura regulación prevista para 2026.
La ley del Govern tiene como objetivo proteger al taxi tradicional, no obstante, cada vez son más los profesionales del volante que se lanzan a probar suerte con Uber. Las cifras así lo demuestran: más de 2.000 taxistas ya han realizado servicios a través de la aplicación de la compañía.
Un cambio de pensamiento
No hay duda de que Uber es una herramienta capaz de multiplicar los ingresos, reducir los trayectos vacíos y acercar a los conductores a una mayor y más variada clientela. Los beneficios extra a final de mes pueden superar los 1.400 euros al mes. Estos datos están seduciendo cada vez a más taxistas, los cuales optan por dar el salto a este tipo de servicio.
Por otro lado, la ley del Govern, podría significar el fin de miles de licencias VTC y, en palabras del CEO de Uber en España y Portugal, Felipe Fernández, «devolvería a Barcelona a los años 90», cuando conseguir transporte en hora punta era prácticamente imposible.
Ante este panorama, los conductores de la Ciudad Condal no tienen otra que adaptarse y buscarse las habichuelas. Resulta curioso que muchos de los taxistas se hayan unido, a la que hasta hace poco era percibida como la competencia, no obstante hay motivos que sustentan ese cambio de pensamiento. Uber ofrece más ingresos, un sistema basado en la tecnología y la modernidad, y una manera diferente de entender la movilidad por la ciudad.
Taxistas y Uber se tienden la mano
No hace demasiado tiempo parecía que la relación entre el taxi clásico y Uber era, cuanto menos distante, sin embargo a día de hoy la situación es muy diferente. En Barcelona, más de 2.500 taxistas usan la aplicación y 500 de ellos se unieron en el último trimestre. Esto demuestra una tendencia de cara a lo que se viene en 2026 con la nueva ley.
La gran ventaja de la aplicación en comparación con el modelo tradicional, es que, siempre se garantiza trabajar con carreras continuas y menos tiempo muerto. Muchos conductores afirman que de esta forma trabajan con más eficiencia y gastan menos combustible. «Antes me pasaba media hora dando vueltas. Ahora, sé que tengo viajes asegurados», destaca uno de ellos.
Un modelo con ventajas
Los datos que se publican desde el propio sector dejan claro que el modelo de Uber es muy atractivo para los conductores. Un taxista tradicional que decida trabajar con la compañía estadounidense puede aumentar sus ingresos mensuales hasta en 1.470 euros. El aspecto fundamental en este sentido es el volumen de servicios, utilizando la app reciben carreras constantes especialmente de turistas o usuarios extranjeros.
Y eso no es todo, porque el ahorro en combustible es patente. Algunos conductores consultados explican que lo antes eran 1.200 euros al mes en gasolina ahora son 800. En resumen: menos kilómetros vacíos, más eficiencia y más dinero en el bolsillo. Uber es una oportunidad de modernizar su forma de trabajar para muchos taxistas.
En cuanto al futuro de los VTC urbanos, la nueva ley catalana del taxi prevista para el 2026, quiere poner en jaque las licencias y obligar a plataformas como Uber a realizar las precontrataciones con varias horas de antelación.
Unas medidas que desde la propia compañía consideran un paso atrás y una involución en la movilidad en la ciudad. Habrá que estar atentos para comprobar como se desenvuelve Uber tras la entrada en vigor de la nueva normativa. Lo que es seguro es que la compañía seguirá adaptándose y avanzando como ha hecho hasta ahora.
