Un simple ajuste puede facilitarte mucho un proceso que realizamos prácticamente a diario con nuestros dispositivos. Es bastante habitual estar en algún establecimiento, como por ejemplo una cafetería, y echar mano al ordenador para adelantar tareas o trabajar un rato. En ese momento es cuando comienza un procedimiento de lo más fastidioso: sacas el móvil, buscas en los ajustes la opción de «Compartir Internet» o «Punto de acceso», la activas, regresas al portátil, buscas la nueva red Wi-Fi en la lista, introduces la contraseña y, finalmente, te conectas.
Una maniobra que, pese a durar apenas un par de minutos, te rompe el ritmo de trabajo y ralentiza tu puesta en marcha. Además, es más habitual de lo que creemos. Otro escenario: estás en casa teletrabajando y se va la luz. El router se apaga y por lo tanto solo te queda tirar de datos móviles. La solución ante estos inoportunos momentos es realmente sencilla. No necesitas apps caras ni trucos raros, existe un ajuste que te permitirá sacar más rendimiento a tu teléfono fuera de casa.
Una conexión automática gracias a un «clon»
Ponerle fin a este incómodo proceso es simple. Lo único que debes hacer es configurar el punto de acceso Wi-Fi de tu móvil para que tenga exactamente el mismo nombre (SSID) y la misma contraseña que la red Wi-Fi de tu casa. Es decir, este truco consiste en crear un «clon» idéntico de la red de tu hogar en tu teléfono. Un ajuste que puede «salvarte la vida» en más de una ocasión.
De esta forma se consigue que, cuando tu red Wi-Fi doméstica deje de funcionar o cuando estés fuera de tu domicilio, lo único que tengas que hacer es activar el punto de acceso de tu móvil. Nada más. Todos tus dispositivos como ordenadores, altavoces, tablets… que ya estén asociados y conozcan la red Wi-Fi de tu casa, se conectarán automáticamente al punto de acceso de tu móvil sin que tengas que tocar absolutamente nada. Simplemente creerán que están conectados a la red Wi-Fi de siempre, la de casa.
Un ajuste que supone un avance importante, puesto que con la nueva configuración ya no tendrás que volver a conectar cada dispositivo individualmente. Y lo mejor de todo es que parece que no hubiera pasado nada.
El ajuste que puede ser tu salvación en momentos de tensión
Aunque pueda parecer que este truco es una simple comodidad, hay en situaciones como un apagón o un corte de internet, en el que se vuelve trascendental. Ante la emergencia digital de quedarte a oscuras y desconectado, este ajuste te otorga seguridad. Simplemente con activar el punto de acceso de tu móvil, los dispositivos emparejados volverán a recuperar la conexión y a funcionar. Tu teléfono puede hacer «revivir» tu hogar gracias a su tarifa de datos.
Ventajas en infinidad de situaciones
Los beneficios de este ajuste sirven para diversas situaciones del día a día como las siguientes:
- En un trayecto en coche: Los viajes largos en los que los pequeños de la casa se entretienen viendo una película en la tablet ya no serán un problema. En vez de tener que configurarlo cada vez que se montan, se conectará automáticamente al Wi-Fi de tu móvil.
 - En un hotel: Es habitual que la conexión Wi-Fi de los hoteles sea lenta o insegura, por lo que con este truco tus dispositivos se conectarán a una red segura y conocida.
 - En una segunda residencia: Igual que en tu domicilio habitual, puedes configurar el punto de acceso de tu móvil con la red Wi-Fi de un apartamento en la playa o una casa en el pueblo.
 
En definitiva, este ajuste tremendamente sencillo y que no requiere de ningún tipo de conocimiento especializado, es un paso adelante en utilidad práctica. Lo notarás en tu día a día.
