Cada año mueren en España cerca de 1.500 personas en accidentes relacionados con el consumo de alcohol, y más de 50.000 resultan heridas. Son cifras que explican claramente por qué en todo el mundo hay fuertes restricciones al consumo de alcohol cuando se está al frente del volante, que van desde un porcentaje aceptable, que se puede verificar con un alcoholímetro, a la tolerancia cero. Es decir, que basta el aliento a alcohol para que seamos multados o detenidos por un agente de tráfico.
En España, la tasa máxima de alcoholemia permitida es de 0,5 gramos por litro de sangre, y 0,25 miligramos por litro de aire espirado, que es lo que nos miden con el alcoholímetro cuando pasamos por un punto de control, o somos detenidos. Esta cantidad se reduce a la mitad en el caso de los conductores profesionales o los noveles, los que tienen menos de dos años con la licencia. Pero esta cifra no proporciona los mismos resultados para todo el mundo. Por ejemplo, dos personas pueden tomar la misma cantidad de cerveza y solo una de ellas va a dar positivo en el control de alcoholemia.
¿Cuántas cervezas podemos tomar para no dar positivo?
No existe una respuesta precisa para esta pregunta. Tal y como señalamos antes, dos personas pueden dar resultados distintos habiendo consumido la misma cantidad de cerveza. Esto se debe a la existencia de factores individuales que influyen en el modo como el cuerpo metaboliza esta sustancia, relacionados con la edad, el sexo, el peso y la altura, entre otros aspectos. También influyen las circunstancias, si hemos comido o bebimos con el estómago vacío, si no estamos bajo los efectos de medicamentos o sufrimos de alguna enfermedad, etc.
En estos casos, también es bueno estar conscientes de que incluso estando en el rango permitido de consumo de alcohol, la ingesta de bebida puede afectar nuestra habilidad para conducir y nuestra capacidad para reaccionar correctamente ante una situación imprevista.
Respecto a las cervezas, un estudio realizado por la DGT señala que un conductor con un peso promedio de 70 kg que ingiera dos cervezas pequeñas, puede dar positivo en un control de alcoholemia. Lo mismo puede pasar si se toma una cerveza grande. Y en el caso de personas con un peso inferior a los 70 kg, se puede superar el límite permitido incluso tomando una cerveza pequeña.
En el caso de las mujeres y de acuerdo con datos proporcionados por la Guardia Civil, si pesa cerca de 60 kg, bastará una jarra de cerveza para que supere los 0,25 mg/L. Con un peso aproximado de 50 kg, esa misma cantidad de cerveza podría dar como resultado en una prueba de alcoholímetro 0,50 mg/L.
Cuál es la cantidad máxima de alcohol aconsejable para conducir
Si al pasar por un control de alcoholemia damos por encima de 0,26 milímetros, las multas pueden estar entre los 500 y los 1.000 euros, y la pérdida de puntos en el carnet puede ser de 4 a 6. Pero esta no debería ser la principal razón para evitar la ingesta de alcohol cuando vamos a conducir. Incluso tomar pequeñas cantidades de alcohol puede afectar peligrosamente nuestra capacidad para llevar adelante una conducción segura: nuestra concentración al frente del volante no es la misma, tampoco lo es nuestra capacidad para tomar decisiones ni para reaccionar ante situaciones imprevistas.
Por esto, la recomendación para los conductores, sin importar la edad o la experiencia en la conducción, sigue siendo la misma: si quieres beber, no conduzcas; y si quieres conducir, no bebas.