Los conductores de ambulancia, o dicho de forma profesional, los Técnicos en Emergencias Sanitarias (TES) son trabajadores imprescindibles en la sociedad. El sector de emergencias sanitarias tiene como objetivo la atención inmediata y el traslado ágil de pacientes en situaciones críticas y de riesgo vital. Por eso, la figura de estos profesionales es clave para garantizar asistencia básica, ofrecer apoyo psicológico y facilitar un transporte seguro hasta el hospital o centro sanitario.
El pódcast ‘Talent Watch’ ha traído como invitado a Arnau, un Técnico que trabaja en España, que ha contado su propia experiencia en el sector y las posibilidades económicas dentro de él. El conductor de ambulancia explica en la charla cómo funciona la profesión y revela cuánto puede cobrar al mes.
Una remuneración que no está a la altura de los conductores de ambulancias
«Cuando entras de prácticas, cobras alrededor de 800 euros al mes. Al terminar las prácticas y con un contrato al 100%, empiezas con unos 950 euros, y luego puedes llegar a 1.200 euros o más según tu experiencia y los pluses que tengas», afirma Arnau al ser preguntado por los salarios en el sector.
Después comienza a desarrollar los diferentes complementos que pueden suponer pluses para la nómina: turnos nocturnos, puntualidad, domingos trabajados o servicios de urgencia. Todos estos aspectos puede incrementar la remuneración. «Los técnicos con muchos años de experiencia, que hacen horas extras y acumulan trienios, pueden acercarse a los 2.000 euros mensuales, aunque depende mucho de la empresa y del tipo de servicio.», destaca el conductor de ambulancia.
Sin embargo, muchos profesionales creen que la remuneración no refleja su responsabilidad y carga laboral. No se valora económicamente la importancia del trabajo. Por ello, Arnau revela que la experiencia y la formación continua es fundamental para progresar y lograr mejores salarios. Además, el conductor de ambulancia lanza un aviso: «El sector de emergencias sanitarias está saturado y requiere de más profesionales cualificados. La demanda de atención ha crecido en los últimos años, y los Técnicos de Emergencias Sanitarias son esenciales para garantizar una respuesta rápida y eficaz en cada intervención».
Un empleo que implica una gran responsabilidad social
El propio Arnau subraya que: «los TES están presentes en todos los dispositivos de asistencia y traslado, realizando alrededor del 85% de las urgencias de manera autónoma«. Esto es un claro indicativo de la responsabilidad social y la autonomía que han de tener en la toma de decisiones. Son los encargados de valorar la gravedad de un paciente y también tienen como labor coordinar el traslado seguro de la persona al centro sanitario.
Pero eso no es todo, un TES también se tiene que ocupar de la preparación y el mantenimiento del equipo médico de emergencia, garantizando que cada ambulancia esté en perfectas condiciones ante cualquier tipo de contratiempo. Estos profesionales son absolutamente vitales para salvar vidas. Una buena actuación, rápida y a tiempo, puede ser trascendental en el pronóstico y la salud del paciente.
Arnau lo tiene claro: «El trabajo es intenso y requiere estar disponible para cualquier tipo de urgencia en cualquier momento». Y no es solo la exigencia horaria, sino que los TES tienen que hacer frente a situaciones realmente complejas tanto física como mentalmente. En el día a día de estos trabajadores hay desde accidentes graves hasta emergencias médicas críticas… y todo ello con la exigencia de la máxima rapidez y precisión posible.
Sin duda, no es un empleo para cualquier persona. Ser TES implica lidiar con el estrés laboral, la responsabilidad y tener un compromiso total. La carga de trabajo de estas personas es muy alta lo que puede generar un tremendo desgaste físico y emocional. Unos aspectos que el sector trata de mejorar pero que la realidad no ayuda a ello: muchas comunidades autónomas dependen de plantillas ajustadas.