Hacienda sigue dando pasos hacia adelante para aumentar el control financiero de los españoles. La Agencia Tributaria se ha propuesto extremar la vigilancia con respecto a uno de los métodos de pago más extendidos: las tarjetas. A partir de 2026, tus compras y movimientos con tarjeta estarán estudiados con lupa, así que no descuides este aspecto.
No estamos hablando de un impuesto nuevo, sino de un cambio que aumentará la trazabilidad de tus pagos. Esto incluye tanto los pagos con tarjeta de crédito, débito o prepago así como las plataformas móviles como Bizum. Hacienda vigilará muy de cerca todas las operaciones superiores a 25.000 euros al año.
Un aviso para aquellos que pagan prácticamente todo con tarjeta o Bizum, puesto que esta medida podría a afectarles. Pero eso no es todo, para los autónomos y pymes el impacto será todavía mayor. La Agencia Tributaria tendrá acceso a casi todas las transacciones electrónicas de este sector, eliminándose así los importes mínimos de comunicación que había hasta ahora.
Hacienda, cada vez más estricta
La última disposición de la Agencia Tributaria se centra en las tarjetas y cuentas de los particulares que rebasen los 25.000 euros anuales. El objetivo de Hacienda es fortalecer la vigilancia sobre los pagos digitales, el dinero electrónico y las plataformas de comercio online; ámbitos que se escapaban un poco del control tributario.
En 2024, Hacienda recaudó casi 19.000 millones de euros, un 13% más que en el año 2023. Este dato indica que el fisco cada vez tiene más mecanismos para la recaudación, y no parece que se vaya a quedar ahí porque ahora van detrás de los consumidores con gastos elevados.
A raíz de esta medida, es recomendable que si realizas grandes compras con a tarjeta, lleves un registro propio de tus pagos. Así no solo controlarás tu presupuesto sino que también evitarás una desagradable sorpresa de Hacienda.
Los autónomos y empresas, en el punto de mira
Si bien, para los particulares esta medida puede ser un simple aviso, para los negocios es mucho más. Cualquier pago con tarjeta, sea cual sea el importe, deberá ser informado a Hacienda si deriva de actividades económicas. Esto comprende pagos a proveedores, ventas en tiendas físicas, «ecommerce» y plataformas de pago móvil.
Hasta la fecha, el límite mínimo para comunicar cobros con tarjeta era de 3.000 euros al año para profesionales y empresa; sin embargo, con la nueva normativa absolutamente todos los movimientos pasarán a estar controlados.
En este caso la recomendación es clara: organiza tu contabilidad mensual y revista todos los cobros con tarjeta. Una buena planificación puede facilitarte, y mucho, presentar declaraciones o la trazabilidad de tus ingresos y gastos.
Así se presenta el futuro del control digital
Esta nueva estrategia fiscal de la Agencia Tributaria española, está enmarcada dentro de un plan europeo para armonizar la supervisión de pagos electrónicos y luchar contra el blanqueo de capitales y el fraude. Dicho con otras palabras, se espera que no solo España siga esta tendencia a extender la trazabilidad y se produzca intercambio de información entre países.
El límite de 25.000 euros anuales (alrededor de 2.083 euros al mes) marcados por Hacienda parece elevado para los consumidores, por lo que la gran parte de la población no debería tener mayores problemas. No obstante, aquellos que realicen pagos frecuentes y de alto valor tendrán que estar alerta y organizar sus operaciones bancarias correctamente. Los expertos recomiendan diversificar los métodos de pago y mantener un registro claro de los movimientos.
Por último, es importante comprender que la digitalización es sinónimo no solo de comodidad, sino también de responsabilidad. La transparencia y la regularización de tus finanzas resulta clave para proteger el sistema económico y reducir la economía sumergida.