La actitud con la que se entrega el coche a un mecánico para que lo revise y lo arregle influye en los resultados del servicio. ¿Qué tiene que ver lo que el dueño del auto le dice al mecánico con el arreglo del vehículo? Tiene mucho que ver. Cuando recibe un coche, antes de siquiera mirarlo, el técnico conoce a su dueño. Lo observa, lo escucha. Y la forma en que este le habla, las palabras que usa, la actitud con la que explica lo que le pasa con el coche predeterminan al mecánico.
Si el mecánico tiene amplia experiencia, le bastarán los primeros minutos de comunicación para saber qué persona tiene enfrente. En ese primer momento del encuentro de ambas personas, el técnico que reparará el coche crea en su mente una imagen de su cliente.
En algunas ocasiones pensará que el dueño del coche se cree un sabelotodo, que es un soberbio que menosprecia su trabajo o un mentiroso que intenta que le cobre menos. Imagen negativa. En otras, considerará que su cliente es una persona que valora su profesión y su taller. Pensará que la persona que tiene enfrente reconoce que si está allí es porque, aunque entienda algo de autos, depende de sus servicios para tener el coche arreglado. Imagen positiva.
Esta imagen que el dueño del vehículo transmite, puede mover el servicio. Por ejemplo, podrá acelerar la reparación y realizará sugerencias de otros defectos detectados o demorar el servicio y reparar solo el problema por el que se lo llevaron.
¿Qué no se debe hacer cuando se lleva el coche a un taller? Este mecánico responde
La idea que el cliente debe instalar en su cabeza es que el mecánico es un profesional imprescindible para que el coche funcione. Este reconocimiento es el punto de partida de su actitud frente al mecánico. Algunas sugerencias de lo que no se debe hacer:
- Hay que evitar los apuros y las prisas. No es conveniente llevar el coche al taller apurado. Se debe evitar dejarlo sin dedicar el tiempo suficiente a hablar con el técnico. Al mecánico le cae bien que el cliente lo salude amigablemente y que le explique detalladamente por qué le lleva el coche.
- Nunca se debe decir «Esto No lo arreglo yo porque no tengo tiempo». Expresiones como esta predisponen negativamente al mecánico, porque le hacen sentir que sus conocimientos y su experiencia no tienen valor.
Cuando el técnico escucha esto, piensa que el cliente quiere que le cobre poco. Al mostrarse conocedor de los problemas del coche intenta decirle «No me estafes, mira que yo sé de esto». Pero también sabe que nada es cierto. En realidad, no lo puede arreglar porque no que sabe qué tiene el vehículo y la falta de tiempo nada tiene que ver.
- Jamás hay que dar un diagnóstico de lo que tiene el coche. Es importante ser detallado al describir los problemas del vehículo. Cuanta más información se proporcione, más fácil será para el mecánico diagnosticar y solucionar el problema.
Pero una cosa es describir los problemas que se perciben y otra es asegurar cuál es la raíz de esos problemas. El diagnóstico es tarea del mecánico, que es quien sabe del asunto.
- No se debe interferir durante el trabajo. Intervenir constantemente, presentarse en el taller o llamar a cada rato molesta al mecánico. Es una muestra de desconfianza que no cae bien.
En el momento en que se deja el coche en el taller, se acuerdan los tiempos estimados de reparación y se puede solicitar una cotización una vez diagnosticado el problema. Pero controlar permanentemente al mecánico es molesto y contraproducente.
- Se debe evitar dejar el coche en el taller una vez que se recibe el mensaje de que está listo. Esto es inconveniente para el mecánico, que probablemente necesita el espacio y el dinero del trabajo.
Dante, mecánico y usuario de TikTok publicó un video con algunos de estos consejos. Su publicación provocó muchos comentarios y otros consejos. No hay duda de que la experiencia de Dante es útil para todos.
