Limpiar el horno de vez en cuando es muy importante. Lo es porque la suciedad se va acumulando y después es muy complejo retirarla. El horno lo usamos en muchos casos a diario o, al menos, un par de veces a la semana. Por ello, si acumula suciedad es importante que sepamos cómo eliminarla bien. Hoy vamos a ver un truco para limpiarlo sin tener que desmontarlo.
La importancia de limpiar el horno frecuentemente
La importancia de limpiar bien el horno, reside en varios factores. En primer lugar, el hecho de que el horno se vaya llenando de suciedad y residuos, puede hacer que después sea cada vez más difícil de limpiar. Esto hará que se necesiten productos agresivos, frotar mucho y se convierte en un trabajo arduo.
Otro de los factores que afectan a la importancia de limpiar bien el horno es que cocinamos en él comidas muy diversas. Dulces, saladas y de sabores diferentes. Esto hace que algunas comidas puedan ir cogiendo el gusto de otras que se han cocinado anteriormente y se arruinen los resultados.
También es importante no dejar que se acumule mucha suciedad en él, ya que después los recovecos son difíciles de limpiar y se puede necesitar desmontar todo el horno para que quede bien limpio.
Cómo limpiar el horno de forma eficiente
Antes de ver cómo limpiar el horno sin desmontarlo, vamos a ver un truco que puede ayudarnos a que se ensucie menos y, al mismo tiempo, a ahorrar energía y tiempo. Se trata de cocinar algunas comidas para tres días, por ejemplo. Con mayor cantidad. Esto hará que perdamos menos tiempo, pero también que se ensucie menos al cocinar grandes cantidades cada vez y usarlo menos, siempre que esto sea posible.
Se puede limpiar sin desmontarlo, aunque en algunos casos cuando está muy sucio pueda dar la sensación de que es necesario sacar los cristales para limpiarlos con ahínco y también por dentro.
Otro de los trucos que es bastante eficiente para limpiar la suciedad incrustada del horno que se queda en algunos recovecos es el de usar bicarbonato y vinagre. Esta combinación en muchos casos es capaz de eliminar hasta la suciedad más incrustada. Basta con rocíar con vinagre las partes en las que haya suciedad más incrustada y, después, habrá que echar encima bicarbonato.
Esta pasta efervescente va deshaciendo la suciedad más rebelde y, después de que así haya sido, apenas hace falta frotar. Por ello puede ser eficiente cuando no se quiere desmontar un electrodoméstico. No obstante, vamos a ver el paso a paso para limpiar el horno más a fondo y sin desmontarlo.
Limpiar el horno paso a paso y sin desmontarlo
Como hemos dicho, vamos a ver el paso a paso para limpiar el horno sin tener que desmontarlo, por si ya no vemos otra solución. Es este:
- Empieza con los cristales: a veces hay un hueco que permite que se acceda a los cristales sin que se tenga que sacar la puerta.
- Limpia entre los cristales: para ello necesitas tener espacio. Es conveniente que saques cualquier cajón o parte que sea fácil de retirar para que te sea más sencillo.
- Accede al hueco: con algún objeto que sea alargado y sirva para limpiar. En este caso puedes aplicar en él el vinagre y el bicarbonato. Para ello, ata al objeto una bayeta, que será la que impregnes con vinagre y bicarbonato para poder llegar sin desmontarlo.
- Insiste: con la bayeta entre los dos cristales y hasta que consigas que la suciedad se vaya eliminando por completo. Hay que tener en cuenta que, como hemos dicho, si queda aún suciedad incrustada sin limpiar, la nueva suciedad se incrustará encima y nunca terminará de estar limpio.