La Organización de Consumidores y Usuarios (OCU), ha puesto el foco sobre un alimento que, pese a ser muy común en nuestro día a día, cuenta con unos valores nutricionales muy preocupantes. Una elaboración sencilla que suele ser habitual en la dieta de muchos españoles, realmente es un peligro para la salud, y especialmente para el corazón.
Estamos hablando de la salchicha Frankfurt, un alimento cárnico sabroso y muy práctico para comer, ya sea en un perrito, en una barbacoa o acompañado de un puré de patatas. Sin embargo, lo que a simple vista pudiera parecer un producto inofensivo, es el culpable directo de algunos efectos nocivos en nuestra salud. Las consecuencias de un consumo desmedido pueden ser fatales.
La OCU advierte de su alto contenido en grasas saturadas, sal y aditivos
El organismo advierte que la salchicha, un alimento consumido tanto por niños como por adultos, realmente es una trampa. El principal problema de este producto es la baja calidad nutricional de muchas salchichas tipo Frankfurt debido a su alto contenido en grasas saturadas, sal y aditivos. Su facilidad y sabor ocultan una composición nada recomendable.
En el estrés del día a día, muchas veces optamos por alternativas rápidas a la hora de comer dejando de lado aspectos importantes como la composición nutricional de los alimentos que ingerimos. La inmediatez nos empuja a decantarnos por soluciones que nos ayuden a salir del paso sin ir más allá. Sin embargo, eso tiene su efecto en la salud y la OCU ha revelado las implicaciones en el largo plazo.
La gran mayoría de las salchichas industriales son un combinación de ingredientes que se alejan mucho de una alimentación equilibrada. Por eso, es muy importante leer con detenimiento la etiqueta de las mismas para así descartar aquellas que puedan suponer un peligro para nuestro sistema cardiovascular.
Mucha menos carne de la que creemos
La composición de las salchichas de Frankfurt ha puesto en alerta a la OCU. Es realmente complicado encontrar unas salchichas compuestas mayoritariamente por carne, lo más habitual es que se le añadan otros ingredientes para optimizar el sabor y la textura, dejando de lado a la salud.
La OCU señala que este tipo de embutidos son un claro ejemplo de ultraprocesado, en el que la carne original apenas representa un porcentaje significativo. No se puede considerar esta elaboración como una fuente proteica de calidad debido a las ingentes proporciones de tocino, cortezas de cerdo, agua o harinas y almidones para ligarlo todo.
El corazón, el principal perjudicado
Los elementos más presentes en las salchichas de Frankfurt son las grasas saturadas, el sodio y los aditivos. Componentes estrechamente relacionados con problemas de salud importantes en nuestro sistema circulatorio.
Los estudios acerca del contenido de este producto llevan a la OCU ha advertir que: «El consumo excesivo de estas salchichas está directamente relacionado con un mayor riesgo de enfermedades cardíacas y problemas de hipertensión».
Y el problema no es la cantidad de calorías que pueda contener el alimento, sino los gramos de grasa saturada, sal y aditivos que ingerimos a lo largo de la semana y que superan ampliamente las recomendaciones sanitarias. Nuestro corazón va a tener que hacer un esfuerzo mayor y con el tiempo puede acarrear dolencias severas.
Priorizar una alimentación más saludable
Para conseguir que tu vida sea más sana y tu corazón más fuerte, debes comer este tipo de alimentos con moderación y priorizar una alimentación más saludable. Los productos frescos siempre han de ir antes que los ultraprocesados, aunque también puedas tener tus momentos para darte un capricho de vez en cuando.
La OCU se mantiene firme en su recomendación de llevar una dieta rica y variada, explorar opciones más sanas y no siempre elegir lo más cómodo o lo más rápido. Cuidar de tu salud depende de ti y la alimentación es la base de ello.