Antonio Hidalgo, técnico de la SD Huesca, ha de afrontar una situación curiosa desde el banquillo del equipo altoaragonés. A pesar de estar destinado a luchar por la permanencia, el conjunto azulgrana se presenta como un caso de doble personalidad: vulnerable en casa, donde ocupa el segundo lugar como peor local de la categoría, y sobresaliente como visitante, también en el segundo puesto, pero esta vez como el mejor equipo fuera de su estadio. Un ejemplo elocuente de su eficacia lejos de El Alcoraz fue su contundente victoria en la pasada jornada contra el Mirandés en Anduva, con un imponente marcador de 0-3. La segunda mitad fue especialmente destacable, permitiendo a los pupilos de Antonio Hidalgo acercarse a tan solo dos puntos de la zona de peligro en la tabla clasificatoria. En resumen, la SD Huesca es un equipo que desafía las expectativas, mostrando su mejor versión cuando juega lejos de su hogar y manteniendo a todos los aficionados en vilo con su sorprendente dualidad futbolística.
Antonio Hidalgo, técnico de la SD Huesca, avisa que han de ir a jugar contra el Espanyol preparados para sufrir
Por lo que respecta al actual técnico de la SD Huesca, el citado Antonio Hidalgo, que llegó iniciado el curso desde el Sevilla Atlético en sustitución del Cuco Ziganda cuando el equipo oscense estaba hundido en la clasificación, llegó a verlo a cinco puntos de la salvación tras su estreno en Eibar (1-1), pero no bajó los brazos y ha convencido al grupo de que la permanencia es posible gracias de dotar a los azulgrana de una notable solvencia defensiva. Desde que llegó el preparador de 44 años, el Huesca solo ha recibido 11 goles en los 18 partidos que ha dirigido, que le han permitido sumar 25 puntos. En este momento puede decirse que el Huesca vive su mejor momento de la temporada, como demuestran las cuatro porterías imbatidas en el mes de febrero y sobre todo los dos puntos que tiene respecto a los cuatro últimos puestos. Una racha a la que les gustaría dar continuidad ante el Espanyol. Aunque Antonio Hidalgo en la previa ya ha advertido de la dificultad del reto: “Como entrenador siempre te gusta tener un poco más de tiempo para preparar a conciencia, pero la competición no para. La victoria del otro día nos da esa confianza en el trabajo que venimos haciendo pero nuestra situación sigue siendo de urgencia máxima, estamos sólo dos puntos sobre el descenso y queremos aumentar esa distancia. Tenemos que competir al máximo ante uno de los rivales más poderosos de la categoría, y sobre todo con la idea de sufrir. Hay que saber sufrir muchísimo durante el partido, que será de exigencia máxima durante los 90 minutos, tienen tanta calidad en el último tercio que en cualquier minuto te despistas y te hacen gol. Vienen reforzados del último partido; venían de una situación un poco convulsa pero el ambiente les ha cambiado y los hace más peligrosos aún”. El técnico del Huesca ha valorado positivamente sobre la segunda parte que hizo su equipo en Anduva pero ha reiterado que cara al futuro no sirve, insistiendo que la capacidad de sufrimiento de los suyos ha de ser “máxima para sacar esto adelante. Esas mejoras están, los jugadores están cómodos en esta estructura ya a seguir creciendo, pero lo hecho hasta ahora no sirve para nada”, Sobre esa estadística de que el equipo es el segundo mejor visitante de la categoría, reflexiona que él prepara los partidos de la misma manera y que el Espanyol lógicamente desearía jugar todos sus encuentros como local”. Sobre el hecho que el Espanyol encaje un alto número de goles, reconoce Antonio Hidalgo que “no nos interesa un partido abierto, hemos de hacer valer nuestra solidez, es donde tiene crecimiento nuestro equipo. Tienen mucha pegada, encajan pero lo solventan con esa pegada arriba”. La baja de Jorge Pulido por acumulación de amonestaciones es un problema para el técnico azulgrana, que contará posiblemente con Carlos Gutiérrez, al que ve “preparado”, para cubrir ese hueco. ¿Y cómo se le puede echar en mano a un rival como el Espanyol?: “Es un día difícil para salir a jugar contra un equipo hecho para ascender, que viene de un golpe moral que les dará empuje desde el primer minuto, además su afición tendrá por eso más paciencia de la que hubiesen tenido de no sacar el partido de Eibar. Ir manejando los tiempos, ir manejando los tiempos como creamos que es mejor, ir al límite, saber que nos harán dano pero también hemos de ser un equipo valiente en este aspecto”. Uno de los retos, parar a un Martin Braithwaite del que reconoce “está muy por encima de la categoría”. “A nuestra gente le digo que estén preparados para sufrir”, ha insistido Antonio Hidalgo en referencia a los 600 aficionados del Huesca que estarán presentes este sábado en el Stage Front Stadium.