Arnau Baqué ha sido este lunes protagonista en La Grada Ràdio, apenas 24 horas después de que se hiciera pública su presentación como futuro propietario y presidente del AC Ajaccio, histórico club de la Ligue 2 francesa. El ex candidato a la presidencia del Espanyol y figura destacada del tejido social blanquiazul ha pasado por los micrófonos del programa para detallar los primeros pasos de una operación tan inesperada como ambiciosa.
Durante la entrevista, Baqué ha repasado cómo se ha gestado un acuerdo que llevaba meses negociándose en silencio y que se ha cerrado por el valor simbólico de un euro, aunque con el compromiso de asumir una deuda cercana a los 9 millones, la mayor parte con la Hacienda y la seguridad social francesa. Tal y como explicó el propio Baqué en su presentación pública del domingo en Córcega, la refinanciación de esa deuda está prevista en un plazo de cuatro años.
En La Grada Ràdio, Baqué ha reiterado algunas de las líneas maestras que ya esbozó en su intervención ante los medios locales franceses: la voluntad de residir en la ciudad y estar presente en el día a día del club.
La operación, no obstante, aún no está totalmente cerrada. El club deberá comparecer ante la DNCG (Dirección Nacional de Control de Gestión) el próximo 28 de mayo para formalizar la compraventa. Según explicó Baqué en su presentación y confirmó en la entrevista, el objetivo inmediato de la actual directiva es lograr un aplazamiento de la audiencia para poder completar la documentación a tiempo.
Con este movimiento, Baqué inicia una nueva etapa lejos del Espanyol, aunque su figura ha estado durante años vinculada de forma activa al entorno social blanquiazul, especialmente al frente de las Seccions Esportives Espanyol. Su salto al fútbol profesional, ahora en un contexto tan exigente como el de la segunda división francesa, marca un punto de inflexión en su trayectoria personal y profesional. El movimiento de Baqué ha generado un fuerte impacto en el entorno perico, que observa con atención cómo uno de sus referentes históricos en el plano social inicia una aventura en el fútbol europeo. Un movimiento sorprendente que no nace de un impulso, sino de meses de negociaciones y decisiones meditadas. Y que, como él mismo reconoció, le cambiará la vida por completo.
“Es una historia muy larga; resumiendo, por motivos profesionales conocí al que ha sido presidente y accionista del Ajaccio muchos años a través de una persona, y me comentó que quería salir del club”, arrancó Baqué, detallando el punto de partida de esta inesperada aventura. “Se planteó la posibilidad de entrar, y al final me convencieron”, añadió, dejando claro que no fue una decisión tomada a la ligera.
Baqué no esconde que la situación económica del club es compleja. “Hay una situación financiera delicada, con una deuda importante para un equipo de Segunda en Francia y más estando en Córcega, pero me han dado toda la confianza y tras dos meses y medio de negociación cuajó”. Asume que el reto es grande, pero se le nota motivado, consciente de que el Ajaccio necesita un giro: “El club tiene mucho potencial, uno de los dos clubes profesionales con campo propio, pero hay mucho que hacer, construir un equipo nuevo porque 13 jugadores acaban contrato”.
Eso implicará un cambio importante en su día a día: “Me tendré que ir a vivir a Córcega, porque hay mucho trabajo que hacer”. No suena como una renuncia, sino como un compromiso.
Sobre su vinculación con Seccions Esportives Espanyol, Baqué fue claro, y habló desde el sentimiento: “Se ha precipitado todo muy rápido, quiero seguir vinculado, son como un hijo pero hemos de encontrar a alguien que lo encabece”. Aunque asume que el futuro pasa por delegar, no se ve cortando el cordón: “Siempre estaré para echar una mano esté o no en Barcelona, con lo luchado no me puedo desvincular de la noche al día, hay que luchar para que siga. Me gustaría ayudar para que Seccions no muera nunca”.
También explicó que la oficialización de su cargo en el club corso aún tardará unas semanas: “Hay un trámite muy importante, hay una Comisión de Control que ha de dar el OK a esta transacción en el plazo de un mes, hay un periodo para aprobar esta transición, una serie de trámites administrativos que harán que mi oficialidad se demore un mes”.
Y como detalle curioso, Baqué desveló que su nueva posición ya empieza a generar consultas en clave peica: “Ayer me preguntaban por Justin Smith, por su pasado francés”, comentó entre risas. El fútbol da muchas vueltas, y él ya está en el centro de una de esas historias inesperadas que solo entienden quienes están hechos de pasión, riesgo y fútbol.