LaLiga arranca este domingo en el RCDE Stadium con un Espanyol – Atlético de Madrid de los que marcan el tono del curso desde el primer minuto y como manda el guion, Diego Pablo Simeone ha pasado por sala de prensa tras el último entreno llevado a cabo en el campo 1 del Centro Deportivo Majadahonda. Fue una comparecencia marca de la casa: pausada pero con ese gesto de tensión permanente, y en la que sorprendentemente no se le preguntó ni una sola vez por el conjunto perico…
El argentino comenzó con una especie de saludo protocolario y enseguida se metió en harina analizando el mercado de verano en clave colchonera: “Hace mucho que nos nos veíamos, contento de veros. Se fueron ocho, agradecimiento por haberlo dado todo. Ahora llegan nuevos, con mucha ilusión. Esperemos que se adapten a las necesidades del club. Habrá que seguir atentos al mercado y buscar lo mejor. Del lado mío, ayudarlos”. Dicho de otra forma: han cambiado piezas, pero él sigue con el mismo guion de siempre, el de encajar cada novedad como si fuera parte de un puzzle que no admite errores.
Sobre su eterna permanencia en el banquillo rojiblanco -son ya 14 años-, Simeone se mostró tan tranquilo como seguro: “Con alegría, feliz de estar en el lugar que quiero y se las consecuencias buenas y malas del lugar que ocupo”.
El técnico también quiso dejar claro que no se vive del pasado y que siempre hay que apretar: “Siempre hay que evolucionar. El equipo debe seguir creciendo a la altura que ha crecido el club”. Y ahí volvió a sonar el clásico Cholo, el de la exigencia constante. Lo mismo cuando se le preguntó por la plantilla: “Debemos sacar lo mejor de cada uno de ellos”.
Ni siquiera cuando le plantearon el debate sobre un supuesto cambio de estilo se salió del libreto: “Siempre los cambios son buenos siempre y cuando respondan a lo que se necesita. No sé si la palabra es cambiar, yo diría mejorar”. Lo mismo ocurre con la eterna comparación con Barça y Madrid; así, al preguntársele si tiene una plantilla corta en comparación con ambos, puntualizaba: “No me apresuraría tanto a compararse. La realidad son los hechos, los jugadores son lindos pero habrá que demostrarlo en el campo. Luego estaremos donde nos merezcamos”.
Hubo hasta espacio para el típico debate de si falta un jugador diferente, un regateador: “Quizás lo tengamos en las características de Baena, Almada… Dependiendo de cómo se cierre la plantilla, buscaremos explotar las virtudes de cada uno”.
También habló del famoso partido que LaLiga planea en Miami, aunque con un punto de ironía: “Siempre nos estamos preocupando de cosas que luego muchas veces no acaban pasando, nos desgastamos en cosas que luego no pasan”. Y lo remató con otra frase de manual: “Del 100% de cosas que pensamos luego pasan el 20%”.
Finalmente, dejó una pista interesante sobre Álex Baena, que podría arrancar como segundo delantero: “Lo ha hecho muy bien y quizás empiece ahí en esa posición. Donde menos lo veo es de extremo. Entendemos que es mejor seguir por esta línea”.
Mientras tanto, en lo puramente futbolístico, la última prueba del once dejó una novedad clara: Johnny Cardoso formó junto a Gallagher en el centro del campo, en lugar de Koke. Así, el equipo que asoma para enfrentarse al Espanyol sería: Oblak; Llorente, Le Normand, Hancko, Ruggeri; Giuliano Simeone, Gallagher, Cardoso, Almada; Baena y Julián Álvarez.
Quedaron relegados al banquillo nombres importantes como Griezmann, máximo goleador de la pretemporada, o Sorloth, recién recuperado.