El Observatorio CIES de Fútbol ha publicado un informe centrado en el rendimiento económico de los clubes en el mercado de fichajes desde enero de 2021 que, de entrada, hay que leer con calma porque tiene truco. Para empezar, solo analiza a los jugadores profesionales que un club ha fichado pagando algo y que luego ha vendido definitivamente a otro equipo. Nada de canteranos, nada de cesiones sin compra previa, nada de futbolistas que suben del filial y luego se marchan. Eso deja la foto un poco sesgada en algunos casos… y el Espanyol es uno de ellos, porque la cantera ha sido básica en el apartado de ingresos en este tiempo, en especial, si pensamos en Joan García.
Los de arriba juegan otra liga: Frankfurt, Brighton, Atalanta, Benfica…
A partir de ahí, el ranking es bastante claro. A nivel europeo, el Eintracht Frankfurt manda con una diferencia enorme, más de 286 millones de euros de balance positivo. Básicamente, ha vendido muchísimo y ha comprado con bastante cabeza, lo que hoy en día es casi una rareza. Buena parte de ese éxito tiene nombre y apellidos: Kolo Muani y Hugo Ekitike, vendidos ambos por 95 millones; Omar Marmoush, por 75; y Willian Pacho, por 40. Y eso sin contar los 63 millones de la venta de Luka Jovic al Madrid ni los 50 que dejó Sébastien Haller, ya que ambas operaciones fueron antes del periodo analizado.
Detrás aparecen clubes conocidos por su estilo de mercado muy afinado: el Brighton, el Stuttgart, el Atalanta, el Benfica… proyectos que llevan años funcionando así y que viven de encontrar talento, mejorarlo y venderlo bien. No encontramos ningún club español entre los 10 primeros clasificados.
Y en el otro extremo están equipos que han gastado más de lo que han ingresado, sobre todo algunos saudíes y varios ingleses que ya venimos viendo que manejan cifras muy difíciles de sostener.
En España, el Girona saca petróleo… y el Espanyol aparece en la zona baja
En LaLiga la película cambia, y bastante. El Girona es el club que mejor sale en la foto, con un saldo (Trading balance) muy alto gracias a un volumen de ventas potente y varios fichajes que luego han dado rendimiento económico. También sobresalen el Betis, el Almería, el Atlético y el Villarreal, que pese a sus altibajos han encontrado maneras de generar beneficios reales.
Y luego está el Espanyol, que aparece en positivo, pero muy justito: un balance de +3 millones de euros en estos casi cuatro años. En total, 19 millones gastados y 22 generados. Es decir, el club no está perdiendo dinero en este terreno, pero tampoco está aprovechando el mercado como otras entidades de un perfil parecido. Solo el Cádiz presenta un dato similar entre los clubes españoles que salen en verde.
Por qué el Espanyol sale tan abajo: un poco por el método… y un poco por su historia reciente
Este resultado tiene dos explicaciones bastante fáciles de entender. La primera es técnica: como decimos, el estudio no cuenta canteranos. Eso hace que no aparezcan en el cálculo ventas de jugadores formados en la Dani Jarque que sí generaron ingresos relevantes para el club. Y claro, si la mitad del negocio no entra en la ecuación, el balance sale distinto.
La segunda explicación ya es más de fondo: en estos años con Rastar al frente el Espanyol no ha hecho demasiadas operaciones del tipo “compro para vender más tarde”, sobre todo porque ha pasado varios años en los que el límite salarial, la necesidad de cuadrar cuentas y un planteamiento bastante conservador hicieron que el mercado se moviera poco, y evidentemente si no te la juegas es complicado que puedas aprovecharte de las ventas. Queda la sensación que el RCDE simplemente no ha sabido jugar a lo mismo que otros clubes que llevan tiempo usando este sistema como una fuente fija de ingresos.
Lo que viene ahora: el informe llega justo cuando empieza una etapa nueva
El informe aparece justo cuando la propiedad ha cambiado y el club está en plena reconstrucción interna. Alan Pace y su grupo han repetido varias veces que quieren profesionalizar todo el modelo y construir algo estable, no solo ir parcheando cada verano. Y, pensándolo bien, los datos del CIES casi funcionan como una pista: el Espanyol tiene margen de mejora enorme en todo lo que tiene que ver con fichajes, estructura deportiva y gestión del talento.
El dato de +3 millones es casi una hoja en blanco: ni desastre, ni excelencia. Simplemente, un punto de partida. La clave, a partir de ahora, será ver si el Espanyol es capaz de transformar su estabilidad en algo más parecido a una estrategia real, de esas que convierten a un club en uno de esos que compran barato, mejoran jugadores y venden bien. Ahí es donde están los equipos que mandan en este ranking. Y ahí es donde el Espanyol aspira a entrar algún día.
El saldo del Burnley, de los mejores de Inglaterra
Como detalle curioso, el informe también deja un guiño indirecto a la nueva propiedad del Espanyol. El Burnley, el club que Alan Pace y Velocity compraron el 31 de diciembre de 2020, aparece como el sexto mejor equipo de Inglaterra en saldo comercial en estos mismos cinco años, con +73 millones de euros.
No es una cifra cualquiera: habla de un modelo que, con sus fallos y sus éxitos, sí ha sido capaz de generar margen real en el mercado. Para muchos pericos, es inevitable pensar que, si esa capacidad de gestionar activos y mover bien el mercado logra trasladarse a Cornellà, quizá el Espanyol pueda empezar a escalar en rankings como este dentro de no demasiado tiempo.


